Mi Eterna Maldición (Re-escribiendo)

capítulo 3

-...p...perdoname...- ese murmullo... ese maldito y asqueroso murmullo suplicando por el perdón sólo hizo que la ira incrementará de aquel ser sombrío repeliendo miles de sensaciones en su aura siendo el sentimiento predominante, el miedo... tristeza... dolor... odio...

Aquella figura sentada en un trono hecho se las mismas sombras sólo alzó una mano antes de chasquear sus dedos, al instante, un eco razonó por toda la habitación invadida por las sombras... perdiéndose en las mismas al igual que cualquier rasgo de luz que hubiese dado una mínima esperanza a las 2 siluetas frente al todopoderoso ser capaz de asesinar con una sola de sus miradas

Aquellos ojos... desprendiendo puro poder, aquellas dos orbes rojas como la misma sangre se posaron en las siluetas. Dándoles una mejor vista de esos ojos estrellados de un color negro con aspas al final de cada punta

El hombre hecho de sombras solo se mantuvo viendo a las escorias frente a él... una mujer llorando en el suelo mientras por debajo de donde estaba sentada, se escurria un líquido blanco, lo cual no se necesitaba ser un genio para saber lo que sucedía. El hombre, al lado de la mujer, no era muy mayor por un poco de su musculatura a la vista por la luz escasa, él se limitó a temblar pero con sólo un acto... cometió el peor error de su corta vida...

Mirarle a los ojos

La mujer, sólo trato de acercarse al Dios en el trono, sólo para ver como el espacio que lo rodeaba, se comenzaba a distorsionar poco a poco

Finalmente, sus piernas fallaron y termino estrepitosamente en el suelo al lado de la silueta masculina inconciente

Sólo pudo ver como el ser desaparecía en un destello sin color, como si se hubiera esfumado de la faz de la tierra con sólo un movimiento

Intento gritar, las palabras parecían pérdidas en su boca, no salían, ¿que sucedía?

Tal vez, el miedo

La causa de desatar un Mal en una persona, la causa... siendo ella... la cual manchó una parte esencial de un puro corazón...

"Todo es tu culpa"

-No...-

"Lo es... mataste lo unico que lo hacía humano..."

-... ¡No!... talvez... me perdone...-

"Estas mal, muy mal, ¡no puedes reparar lo que ya esta roto! ¡eres una persona mala! ¡mala! ¡mala!"

- ¡cállate!-

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Unos párpados se comenzaron a abrir lentamente, parecían algo... cansados... Pero aún asi, se abrieron dejando ver unos hermosos ojos lilas

Aquellas Orbes, observaron la habitación con lentitud y una pizca de tristeza. Estaba bastante iluminaba por la luz del sol, algo formal, como si se tratase de la habitación de alguien importante

La silueta acostada, se sentó en aquella cama de dos plazas. A la vista, muy suave pero... la mujer sólo opto por tapar su desnudez para luego mirar las sábanas con tristeza y dolor evidente

- ¿cariño?- desvío su vista un poco investigando la suave voz que interrumpió sus pensamientos, para ver en el marco de la puerta a un hombre rubio, ojos azules encantadores junto a unas mejillas decoradas con bigotes de zorro

El hombre sonrió coqueto haciendo abrir los ojos a más no poder a la mujer sentada. Con la rapidez que le permitía su cuerpo, tomó una sábana y se cubrió, para luego saltar y abrazar al rubio enterrando su cara en el pecho de aquel que le había robado su corazón con tan solo... la primera sonrisa que le brindó... Aquella dulce... hermosa... y llena de confianza sonrisa...