Capitulo 13 1/2

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Esa noche se lo pasaron de lo más genial, aunque después de un rato tuvieron que salir del mar ya que comenzaba a subir la marea, cerca de las 3 de la madrugada ambos se quedaron sentados en la arena, observando el bravo oleaje del mar, la brisa era refrescante podría estar ahí toda la noche, estaban relajados, por primera vez desde que se volvieron a ver no estaban discutiendo solo estaban sentados en esa playa.

Decidieron ponerse sus ropas para ir a caminar por la playa, platicaban de muchas cosas, reían y de repente se atravesaban momentos donde un silencio invadía el lugar a excepción del sonido del mar, dos aves, un gallo y un loro caminando bajo la luz de la luna, Panchito se detuvo un momento y eso le extraño al loro, este se acercó al gallo para ver que ocurría "Panchito ¿Qué pasa?" fueron las palabras dichas por el loro, hubo un silencio, un silencio de unos tres minutos, tres minutos que se habían vuelto eternos, José se estaba desesperando y cuando había decidido hablar un leve matiz de color naranja cubrió su rostro, estaba amaneciendo, ni si quiera sabia en que momento perdió la noción del tiempo, el sol salía lentamente iluminando el lugar con tonalidades rojizas y naranjas, incluso pudo notar que el mar estaba calmo, aquella escena llamo por completo la atención del loro, Panchito lo miro con "otros ojos" el brillo que desprendían los ojos del brasileño era simplemente único, pensándolo bien José era único, el mexicano a lo largo de su vida había conocido a mucha gente, pero nunca había conocido a nadie que se comparara a José, ni siquiera Donald a quien estimaba mucho, pero con José... Con él era diferente, se sentía lleno, relajado, feliz... Se sentía vivo.

-José...-

Ese nombre resonaba en su mente, una y otra vez mientras su corazón se aceleraba, y con claridad se pudo dar cuenta de que no era cariño y simple amistad lo que él le otorgaba al brasileño, no... Era más que eso... ¿Acaso era amor lo que el sentía? Sabía que muchos artistas se declaraban abiertamente homosexuales, pero no quería arriesgarse a que José no correspondiera a ese sentimiento, un sentimiento tan puro que ni el mismo se lo podía creer, tantos años confundiendo la pasión con el amor, tantas jovencitas con las que salió y tantas a las que les rompió el corazón, y ahora él estaba pasando por eso, por eso que nunca le importo, dejar llorando a muchas "señoritas" en la mesa de un restaurante...

-¿José...?-

El loro lo miro un tanto confundido, Panchito sonreía pero con cierta melancolía, se miraban fijamente a los ojos, el amanecer había sido hermoso y el gallo estaba feliz de que José pudiera disfrutar ese momento, y ahora que lo pensaban los ojos de su amado amigo eran como el amanecer, sus ojos tenían esas tonalidades.

-Panchito ¿estás bien?-
-Si... lo estoy, vamos a casa...-

El loro sonrió, su sonrisa contaba con una tranquilidad que podría relajar a cualquiera, así que saliendo de la playa subieron a un taxi y se fueron directo a su casa.

Mientras tanto y unas horas más tarde...

-¡Oye Tere! ¿Ya estas lista?-
-¡Si Javi, solo permíteme un momento!-

Teresa llevaba puestos unos jeans azules, unas botas negras y un saco largo de color negro (tipo vestido) tomo el dije y el anillo que Panchito le había obsequiado, puso el dije en una cadenita de plata que tenía guardada y se puso el anillo en el dedo anular de su mano derecha, y la cadena con el dije en el cuello, bajo bastante arreglada, tomo su bolso y salió de la casa.

-¡Vaya! Luces realmente hermosa Teresita-
-Gracias joven Javier, jajaja-
-¿Lista para salir a pasear con tu buen y mejor amigo?-
-Claro mi estimado Javier-

Teresa y Javier tenían planeado salir a pasear, ir al cine, salir a comer, bastaba decir que el gallo estaba muy molesto por el desplante que le habían hecho a su amiga, si en algún momento pensó en tratar de llevarse bien con Panchito, eso ya había quedado atrás, aunque la forma en la que ese tal Francisco había dicho que saldría con José Teresa no había mostrado desilusión , ni indicios de tristeza, al contrario la miro sorprendida como si de algún modo ya se lo hubiera esperado, aun así le daba igual, al menos por cortesía... En realidad y aunque a Javier le doliera admitirlo Francisco había hecho lo correcto fue directo al grano en vez de estar buscando excusas para no salir con ella esa noche, de todas formar le parecía una falta de respeto que la dejara de lado para irse con su amigo.

Los días pasaban rápido, Panchito iba y buscaba a Teresa no pasaron más de cuatro citas cuando Teresa comenzó a tener más trabajo de lo habitual, y aparte de eso cuando Panchito iba a buscarla Javier salía para decirle que tenía trabajo ese mismo día y demás, aunque no fuera cierto, a él le molestaba que fuera a buscarla y más le molestaba que aplicara lo mismo cada vez que ella no fuera a salir con el "Bueno entonces dile que saldré con José" eso lo sacaba de quicio, y aunque fueran cuatros citas ella trato de luchar para lograr una relación seria con el gallo mexicano conocido como Panchito Pistoles, se esforzaba en aquellas citas o en tratar de mantener comunicación con él, hasta que se dio cuenta de que todo ese esfuerzo sería inútil, cada vez que lo miraba a los ojos no veía intención de sacar adelante una relación, a parte, esos "síntomas de enamoramiento" habían pasado rápido, tal vez fue el trabajo, tal vez fue el distanciamiento o la falta de comunicación, o simplemente se dio cuenta que esto no llegaría lejos, pues todo fue tan deprisa, solo estaba confundida y un tanto esperanzada.

5ta cita:

Panchito y Teresa iban caminando tranquilamente por un parque, el gallo estaba muy serio y pensativo, la joven trataba de romper ese silencio con diferentes temas de conversación pero todo era en vano, Panchito no ponía de su parte, solo estaba ahí pensando...

-Panchito, pronto voy a grabar un disco ¿Te gustaría participar en él?-
-Ehh si...-
-Te veo un poco serio ¿Te ocurre algo?-
-No, estoy bien-
-Mmm... ¿En qué piensas?-
-En nada Tere...-
-Aja... José es muy bueno moviendo las caderas ¿verdad?-
-Jeje si... Espera ¡no! Bueno si y no...-

Teresa lo miro un tanto disgustada, Panchito se había ruborizado, era la primera vez que lo veía así, así que decidió molestarlo un poco...

-Debo de admitir que es muy bueno bailando hace dos semanas salimos ¿no sé si lo recuerdes?-
-Si... Si lo recuerdo-
-Y tal y como esperaba es muy bueno bailando, ya estoy pensando en contratarlo para que sea mi maestro de danza-
-Ahhh ¿s-si?-
-Claro, ¿Tiene algo de malo? Gallito-

Panchito sintió un golpe en el estómago, José como maestro particular de Teresa no le gustaba, no le gustaba nada la idea, sabía que ellos dos habían hecho cierta química, una especie de conexión muy rápido, y que salían a pasear bastante seguido ¿Qué será lo que hacen cuando salen? Ya tenía tiempo preguntándose eso, de todas formas tenía que sacar esa idea de la cabeza de Tere.

-Sabes, el me prometió que lo haría, que sería mi maestro de baile-
-Ahh... ¿Y cuándo? ¿Cuándo te prometió eso?-
-El otro día...-
-¿Y que más te prometió?-
-Solo eso...-

Ambos ya estaban bastante enfadados así que sin discutir Panchito llevo a Tere a su casa, ya estaban enfadados, Teresa le disgustaba la actitud de Panchito y a Panchito le disgustaba la actitud que estaba tomando Teresa, y en una jugada rápida el gallo le pregunto a la gallina...

-Oye Tere ¿No me vas a dar un beso de despedida?-
-No lo creo Francisco, buenas noches-

El gallo la tomo del brazo y junto su pico con el de ella, dejándola totalmente ruborizada e impactada por la acción que tomo el contrario, Panchito pudo haber seguido con el beso hasta que sintió presión en su mejilla, Teresa estaba furiosa, le había dado tremenda cachetada, ese lado de su pico punzaba debido a lo fuerte del golpe, Panchito se quedó catatónico no se esperaba esa respuesta, era la primera vez que una mujer (muchacha, señorita, etc) rechazaba un beso suyo.

-¡¿Qué crees que haces?! ¡¿Crees que con eso voy a dejar pasar que pienses en José todo el día?! ¡Deberías de abrir los ojos para que te des cuenta de lo que hay a tu alrededor!...-

Panchito no respondió solo la miraba impresionado, nunca se imaginó que Teresa fuera así cuando se enojaba, la gallina estaba indignada y antes de entrar en su casa le recito unas últimas palabras.

-Deberías dejar de ser tan egoísta (sollozo) y darte cuenta que estas lastimando a alguien que no merece sufrir...-
-¡Tere, espera!-

Dicho esto entro ensu casa, cerrando la puerta en la cara de Panchito, el gallo la llamaba, dejode insistir cuando escucho el llanto de la joven al otro lado de la puerta, talvez no estuviese enamorado de ella, pero con eso se pudo dar cuenta de que esagallina, esa gallinita con voz angelical era una chica única, y seriaafortunado quien se ganara su afecto. 

¡Tranquilos que no cunda el pánico! Mañana subiré la segunda parte, pero acabo de sufrir una tortícolis, bueno mi niña se puso brava, y en la segunda parte Panchito va a recibir una carta muy importante... 

Disfruten el capitulo, les ha hablado Xariam y les deseo: Buenas noches ^u^

Eres único para mi...   You are only one for me...Where stories live. Discover now