XIII

49.4K 4.8K 1.6K
                                    










XIII. Su Majestad.









Casi cuatro semanas habían pasado desde el día en el que Shawn había venido a gritarme sobre lo harto que estaba de mi.

Después de que me bajara del vehículo que me había llevado al castillo, me eché a andar con dirección a la parte trasera, y no fue precisamente para entrar por la puerta de empleados, fue para irme del castillo y regresar a mi casa.

No tenía nada conmigo, ya que todas mis pertenencias iban en la maleta que se había quedado en la cajuela, por lo que tuve que regresar andando, cuando llegué a mi casa luego de casi una hora, busqué la llave que mi madre escondía debajo de una maceta de flores, y me adentré a mi hogar asegurándome de cerrar todo bien.

Aproximadamente veinte minutos después de que llegara escuché desde mi habitación cómo la puerta principal se abría para posteriormente cerrarse en un golpe que retumbó en las paredes de la casa, segundos después escuché a Shawn gritar mi nombre, y no se escuchaba nada contento.

Bajé las escaleras y él empezó a gritarme un sin fin de cosas que no quiero repetir, si no se atrevió a lastimarme fue probablemente porque un mueble se encontraba entre nosotros impidiéndole acercarse más de lo necesario a mi. Al final le terminé diciendo que estaba cansada, y que por favor se marchara de mi casa. Después de todo lo que me había dicho no quería verlo, y se había cumplido mi deseo, porque desde ese día no lo había vuelto a ver.

Supongo que después de eso todo pudo haberse quedado así de tranquilo, pero no fue lo que sucedió.

Me echo a llorar en cuanto termino de devolver el desayuno, desde la semana pasada las náuseas y mareos que sentía eran insoportables. Mi periodo tenía que haber llegado hace más de diez días, pero seguía retrasado, me sentía débil y cansada durante la mayoría del día, ya no tenía duda de que estaba embarazada, por segunda vez.

A diferencia del primero en el cual no presenté síntomas claros, en este era diferente, incluso el olor del shampoo que regularmente usaba ya no lo soportaba. La mayoría de la comida me daba asco, y la que no lo hacía, terminaba vomitando la mitad, en si, lo único que se me antojaba comer todo el tiempo eran las benditas fresas con crema.

Ni siquiera sabía el motivo de mi actual llanto, pero una vez que limpié mis lágrimas me puse de pie, lavé mi boca quitando el sabor amargo que tenía en esta, y al terminar también lavé mi cara observando esas horribles bolsas negras que adornaban mis ojos.

Tenía miedo, estaba asustada porque ahora me encontraba sola en esto, ¿y si volvía a perder a mi hijo? No quería arriesgarme, tampoco quería sentirme sola, por lo que hace tres días hablé con mi amiga Gabriela, vino a mi casa y le conté que estaba embarazada, obviamente evité entrar en detalles, como que había tenido un aborto y como quien era el padre de mi hijo, pero de todas maneras Gaby me ofreció su apoyo, y hoy había quedado de llevarme al doctor para que me hicieran un chequeo.

Después de ir al doctor me tranquilicé, afortunadamente la doctora había dicho que todo parecía marchar a la perfección, estaba en mi quinta semana de embarazo, y no pude evitar pensar que tenía el mismo tiempo que cuando perdí a mi primer bebé.

-Todo va a estar bien Thea, ya oíste a la doctora, sólo procura seguir estrictamente sus indicaciones. -Gaby me dice apretando mi mano. -Ahora vamos por tu dotación semanal de fresas.








⚔️⚜️⚔️






-Thea despierta. -Escucho su voz en la lejanía.

-Thea. -Está vez siento como mueve mi hombro ligeramente, pero me siento tan cansada como para despertarme.

-Thea, por favor, despiértate. -Insiste y yo finalmente cedo gruñendo por lo bajo.

Me remuevo en mi cama antes de tallar mis ojos y bostezar, al abrir mis ojos me encuentro con Shawn sentado en la orilla de mi cama, me sobresalto y por instinto me alejo de él lo más posible quedando en el lado contrario de la cama.

-¿Qué haces aquí? -Le pregunto con mi voz soñolienta.

-Necesitamos hablar Thea, ¿a qué fuiste al doctor?

-¿Cómo sabes que fui? -Cuestiono y él niega.

-Ese no es el punto, te hice una pregunta.

-No es algo que te interese. -Respondo cortante.

Shawn se pone de pie luciendo irritado, me encojo en mi lugar abrazando mis piernas y lo escucho bufar.

-No empieces Thea, no estoy de humor para soportar tus escenas.

-¿Mis escenas? -Pregunto incrédula. -¿Sabe qué, su majestad? Si no tiene humor para soportar mis escenas entonces váyase de mi casa. -Le reprocho poniéndome también de pie.

-No me voy a ir, no hasta que me digas a qué fuiste al doctor. -Responde con el mismo nivel de irritación, y eso me hace enojar mas.

-¡LÁRGATE DE MI CASA! -Le exijo gritando y él niega.

-No me voy a ir. -Repite sacándome de quicio.

-¡VETE SHAWN! -Vuelvo a gritarle esta vez acercándome a él para empujarlo fuera. -¡NO TE QUIERO AQUÍ, VETE! -Golpeo su pecho pero él toma con rapidez mis brazos haciendo que me detenga.

-¡NO ME VOY A IR! -Grita imitándome, manteniendo un agarre firme en mis brazos.

-¿POR QUÉ NO?

-¡PORQUE TE QUIERO Y ME PREOCUPAS! ¡AHORA DÍMELO!

-Estoyembarazada. -Suelto tan rápido en un susurro que me temo que no me haya escuchado.

Shawn suelta mis brazos haciendo que estos caigan a mis costados, nos miramos en un profundo silencio que parece durar una eternidad, no sé en qué está pensando él, pero yo no podía dejar de pensar en que me había dicho que me quería.

-Vamos a tener un hijo. -Dice, pero parece que lo dice para sí mismo.

Shawn sonríe como pocas veces lo hace antes de ver como se inca frente a mi, su rostro queda a la altura de mi vientre aún plano, sube mi blusa un poco y besa mi abdomen antes de rodear mi cadera con sus brazos aferrándose a mi.

-No nos van a volver a arrebatar a nuestro hijo Thea, no a menos que yo lo permita.




Hola, hola. ¡DECLARO INAUGURADA UNA NUEVA ETAPA DE SUFRIMIENTO! "Wachense" este capítulo tan... tonto a decir verdad. No sé ni qué piensan tanto Thea como Shawn, y eso me asusta. Los amo. ⚡️

H E I R   |S.M.|   #2Where stories live. Discover now