Midnight [KookMin]

•Prológo•

☆♡♤◇♧

Estoy seguro que este amor,
no fue con el que yo soñé...
¿Podemos llamarlo amor, realmente?

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Estoy fuera del rango de mis capacidades, he sufrido un millón de veces para poder estar aquí de pie frente a un futuro prometedor, pero no por esto dejara de ser un futuro.

El futuro es un tiempo impredecible, un mañana que añoramos y nos hacemos creer que podemos avanzar como personas. Soñando que nos irá mejor, que tendremos más dinero, más oportunidades, más de todo lo que la sociedad nos dice que debemos de tener.

¿Es posible vivir sin haber amado? Existen dos tipos de personas en el mundo:

1. Las personas que están destinadas a vivir una vida cómoda, sin carencias de nada, aquellas que desean y se les concede, en cada una de las necesidades humanas. Las que forman parte de los personajes principales de una historia de amor; el mínimo porcentaje, la excepción del chico malo del cuento de hadas.

2. Personas que siempre serán Co-protagonistas de la historia, y por más que se esfuercen en desear al personaje principal del cuento, jamás serán princesas o príncipes. Se conformarán, serán el segundo en cada ámbito de su vida. Una estrella que jamás se le dará la oportunidad de brillar.

¿Te identificas con algún papel?

Los primeros suelen ser extremadamente atractivos, y en su defecto una belleza extraña, pero los segundos... ¿necesariamente deben ser feos? ¡Por supuesto que no!

Las personas que por azares del destino entran en la segunda categoría suelen ser más atractivas que las primeras, ¿pero entonces por qué no son felices cómo los que poseen un puesto más que ellos?

Fácil, el destino y la vida no es algo justo, no hay equilibrio en la naturaleza, jamás ha existido tal cosa.
No existe explicación alguna o una fórmula, para lograr tus sueños. Existen ocasiones que la vida te provee con fortuna, pero no con amor; o viceversa.

El amor es un mito que va más allá de las lenguas viperinas, ¿hasta qué edad dejamos de creer en el amor?

Los primeros años de vida, todo es un mañana, un futuro predestinado de éxito. El sueño de que llegará alguien que nos amará por cómo somos, justo con las expectativas físicas e intelectuales cómo nosotros deseamos. Pero al paso del tiempo nos damos cuenta que eso jamás pasará, qué no somos parte del elenco protagónico de la historia, y solo somos el personaje chistoso que sale en breves escenas, y que nadie recuerda su nombre.

Es algo que se puede aprender en el transcurso de los fracasos amorosos, los hombres no son tan mágicos cómo los medios logran plasmarlos, ni las mujeres tan únicas.

Un sabio dijo algún día, ¿existen excepciones en la vida? Pero no los somos, existe un llano en la vida que nos corta y transporta a la realidad, aquel momento donde caemos y nos encontramos en el abismo sentimental.

[...]

Estoy aquí, justo aquí. Mis decisiones me llevaron a este punto brillante de oscuridad.