Sword Gold

Servant Class (Richard Lionheart)

Chaldea Stories 23

—Mi nombre es Richard Lionheart, servant clase Saber, trabajemos juntos de ahora de adelante master.

—¡Lo siento, de verdad, lo siento Lionheart, tengo que irme ya mismo, Enkidu encárgate de él!

Y así sin más la pelirroja había salido corriendo de la sala de invocación dejando únicamente al peliverte y al recién invocado servant.

Enkidu sonrió amistosamente mientras Richard devolvió el gesto con nerviosismo al sentirse observado.

—Es un gusto conocerlo Enkidu-san...—se sintió ligeramente incomodó cuando el Lancer comenzó a dar vueltas a su alrededor inspeccionándolo sin respetar para nada su espacio personal.

—Mmm, cabello rubio y un porte afable como el de Arthur—se rascó la barbilla con curiosidad sin dejar de evaluar cada aspecto del Saber frente a él—Ojos rojos como los de Gilgamesh—finalmente puso sus manos sobre los hombros del recién llegado—¡Sip! ¡Definitivamente eres perfecto!

—Eh... ¿Perfecto para qué? —preguntó confundido.

Enkidu amplió mucho más su sonrisa con un ligero brillo de malicia. Cualquiera que lo conociera sabria que el susodicho estaba tramando algo, desgraciadamente para Richard, al ser nuevo en Chaldea no tenia ni idea de lo que le esperaba.

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Chaldea era definitivamente un caos, no había explicación para lo que había sucedido y las únicas personas capaces de resolver la situación había salido a una expedición.

—¡Gilgamesh, se esta escapando! —Arturia señalo a su compañero indicando como la escurridiza figura de una niña de cabellos dorados huía de ellos.

—¡Vuelve aquí en este mismo instante señorita! —el rey de los héroes corria detras de la niña siendo seguido muy de cerca por Saber.

—¡No quiero! —ella reprochó sin detenerse mientras reía divertida—¡Atrápenme si pueden!

—¡Nero Claudius Caesar Augustus Germanicus, detente en este mismo instante si no quieres ser castigada! —Arturia gruñó irritada.

La niña volteó a ver a sus perseguidores sin detenerse sacándoles la lengua en un acto infantil luego de lo cual chocó con un hombre que de inmediato la alzó en sus brazos.

—Parece que no la están pasando muy bien cuidando de Nero, ni siquiera voy a preguntar cómo es que su cara termino embarrada de chocolate—comentó la versión madura de Gilgamesh inspeccionando a la pequeña emperatriz.

—Bueno, es bastante natural que no tengan experiencia con los niños, aun son bastante jóvenes como para saber tratar con ellos—Arturia Lancer comentó limpiando con dulzura el rostro de la pequeña que su compañero cargaba.

Detrás de las piernas de la reina asomó una pequeña figura sumamente familiar para los reyes. Mordred se soltó de Lancer y fue corriendo a abrazar al Archer dorado.

—¡Madre! —exclamó tomando desprevenido a Gilgamesh al abrazarlo de sus piernas haciendo que el susodicho se paralizara, a diferencia de su versión madura a él le resultaba complicado interactuar con los pequeños.

—Como te atreves...—contuvo su irritación poniéndose de rodillas y despeinando a la pequeña—En todo caso debes llamarme "Padre" ¿Comprendes?

—Madre—dijo la pequeña de nuevo inclinando la cabeza.

—¡Padre! ¡Debes llamarme padre!

—¡Madre, madre, madre, madre! —repitió haciendo al rey de los héroes frustrarse.