Un triste sueño logrado

Capitulo 3

"A la mañana siguiente, vi que tenía complicaciones, pues fue necesitada de sirvientes así que me dio algo de simpatía su situación, bañarse en un río, hacer trabajos para pagar la su cabaña, hacerse el almuerzo, arreglarse, usar ropa adecuada, un sinfín de cosas que le pareció difícil y tuvo que asumir las consecuencias de irse de su comodidad, en cambio para mí fue algo fácil, pues viví en los suburbios de su reino, no me daba vergüenza mostrar mi cuerpo en el río, mi ropa fue indicada para el tipo de trabajo que conseguí ahi, cosechar el maiz, mi cabaña no estaba tan lejos, nos separaba de 50 metros de distancia, algo de armonía y empatía se veía de todas maneras en el ambiente, se ayudaban mucho, nunca me imaginé un mundo así, no estaba acostumbrado a que se ayudarán a otros, sino a que les criticarán y los golpearan para quitarles algo suyo, en fin para la noche nos despedimos, fue una jornada larga en donde no nos topamos mucho pero si teníamos la intención de vernos, pues era alguien a quien más confiaba entre los campestre, aún siendo de barrios bajos. Para el siguiente día fue la misma jornada, aunque se le facilito más las cosas, incluso se dio el tiempo de ser ingeniosa en su trabajo y termino más rápido, mientras yo lo hacía como los demás sin nada más que esperar el atardecer, ella se acercó a mirarme y preguntarme si necesitaba ayuda, en eso le pedí amablemente que no se preocupara, no quería verme mal en frente de todos, llego la tarde y yo terminé por fin, ella ya estaba comiendo en su cabaña, a mí me tocó ser un poco sencillo y me hice una rica sopa, llego la noche y sentí que debía seguir mi camino, pero me detuve y pensé en lo que estaba logrando de a poco, así que me tomé un descanso saliendo de mi propiedad, mire las estrellas y mi vista nunca había presenciado algo tan hermoso, me perdi de cosas tan extraordinarias, en eso escuche unos pasos en la tierra, me di vuelta de inmediato con intenciones de reducirlo, pero una luz que se proyectaba de una linterna de fuego me hizo ver que era ella, la princesa."