Los Pecados del Hijo [Woogyu]

Este es mi hogar

Este es mi hogar

Finalmente, por fin, Sunggyu va a casa.

Cuando Hoya irrumpió en su habitación y la de Woohyun a altas horas de la madrugada para anunciar que su avión había aterrizado y que se irían en dos horas, Sunggyu estaba sobre la luna.

Así que aquí estaba, llegando a la pista de aterrizaje privada y saliendo tambaleándose de sus autos. El clima era un poco frío, sobre todo el frío penetrante del viento, pero Sunggyu está envuelto en la sudadera con capucha y el largo abrigo de Woohyun. Ya que el mayor está vestido con pantalones vaqueros y una chaqueta delgada eso está más allá de el.

"Woohyun, ¿qué vamos a hacer con esto?" SungYeol levanta descuidadamente la forma inconsciente de Yulian por la parte trasera de la camisa del chico ruso. Aparentemente, Yulian se había sobrepasado un poco con SungYeol después de una discusión y fue rápidamente noqueado por sus respuestas.

Y ha estado inconsciente desde entonces, aunque SungYeol se niega a usar sus pastillas para dormir con vehemencia a pesar de su constante "ahora es mucho más silencioso".

Sinceramente, Sunggyu casi tiene la pequeña esperanzas de que Woohyun les diga que dejen a Yulian en una parada de autobús con suficiente dinero para ir de vuelta a Rusia, pero su mandíbula se le queda colgando cuando Woohyun le dice: "Lo llevaremos".

Sunggyu frunció el ceño. "¿Por qué?" Woohyun arrastró sus orbes de tinta oscura hacia Sunggyu.

"Ninguna razón." Sunggyu siente el dedo temblar en su mano y frunce el ceño. "¿Qué?"

"Dijiste que no me mentirías más".

"¿Cómo sabes que no estoy mintiendo?" Sunggyu abre la boca para responder, pero su cerebro está confuso. Espera. ¿Qué? ¿No estoy mintiendo? ¿Eso no significa que miente sobre no mentir? ¿Eh ? Para cuando Sunggyu abandona su enigma, Woohyun camina con paso inmaculado y dominante hacia el avión.

"¡Oye!" Incluso con sus piernas siendo más cortas, Sunggyu se pone al día rápidamente. "Dime."

"No es nada. Solo un presentimiento", murmura Woohyun. "No hay nada de qué preocuparse por ahora".

"¿Cuál es el presentimiento?"

"Sunggyu", replica Woohyun.

"¿Por favor?" él suplica. "Esto me involucra, ya sabes. Directamente. Así que".

Woohyun pone los ojos en blanco y se sienta en una silla vacía, inmediatamente acomoda al peso que pronto se vuelve en un koala pegajoso llamado Sunggyu. "Hola, bebé", retumba Woohyun, y Sunggyu se derrite. Después de inspirar y exhalar profundamente, el Señor del Crimen responde: "Tengo una sensación molesta sobre él, eso es todo. No me siento bien acerca de el".

"¿Qué crees que significa?" pregunta Sunggyu, curiosamente. Está buscando una mejor posición, y encuentra una cómoda estancia entre los muslos de Woohyun y deja que sus pies cuelguen perezosamente sobre el borde del brazo de la silla, las puntas de sus zapatos rozando la silla junto a él.

"Aún no lo sé", murmura el mayor, deslizando su mano en la parte inferior de la espalda de Sunggyu. "Pero ciertamente no quiero que se vaya hasta que resuelva este sentimiento".

Sunggyu asiente en comprensión. Todo el mundo está a bordo del avión, SungYeol se pegó a Myungsoo y Hoya y Dongwoo se sentaron uno frente al otro con el último aparentemente hablando al oído del señor con gafas.

SungJong está fuera de su vista, ya que no está ni por asomo. Sunggyu está seguro de que acecha en algún lugar en el fondo del avión. Yulian está con el Señor más joven, de acuerdo con el recordatorio increíblemente brillante y excesivamente entusiasta de Sungyeol.