Capitulo 59

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Narrador

TRES DIAS

Lleno de soledad, en un jardín fantasioso de flores marchitas, el sol estaba escondido entre las nubes impidiendo ver un brillo que no existía.

¿Quién soy?

Una pregunta fácil pero difícil. Sus pies débilmente caminaban entrando por la misma puerta donde todo comenzó, cuando el viento fresco soplo haciendo contacto con su cuerpo desordenando sus mechones enfrió sus mejillas, sus ojos agotados y sin ese brillo donde solo se podía ver el vacío miraban fijamente el cielo deseando poder verlo de nuevo.

Ese jardín...no era lo que creía que era, el piso era duro, seco, frio e insípido. Sus pies reaccionaron empezando a caminar hacia la misma dirección que lo había hecho por primera vez.

Dolía...el destino no le sonreía, lo que más deseaba era ser iluminado pues su alma sufría...porque no podía ir hacia él. Se sentía deteriorado...asustado de poder dejarlo en el final.

¿Qué podía hacer?

En ese jardín, en ese mundo, su flor no podía florecer, ya no existía su respirar, lo quería...

Sus ojos observaron las mismas barras donde lo había visto por primera vez ¿Por qué todo había cambiado? No sostuvo las lágrimas porque lo que más amaba había desaparecido, el mundo que el buscaba había colapsado...lo amaba 

-No puedo vencer a mi triste corazón...- Susurro cantando suavemente

Seoreoun mameul moti gyeo


-Nuevamente soporto la oscuridad y las noches en vela...- Su vista vacía miraba a la nada

Jammotdeuldeon eodun bameul ddo gyeon digo


-Sin importar mi desesperación

Naejeol manggwan sanggwan eopsi


-El amanecer me despierta indiferente...

Musimhagedo achim eunnal kkaeune


-La herida quema más de lo esperado- Su voz empezó a quebrarse

Sangcheoneun saenggakboda sseurigo


-El dolor llega más profundo de lo que pensé

Apeumeun saenggakboda gipeoga


-Las incontables noches resistiéndote son como el infierno para mí...-

Neol wonmanghadeon sumanheun bami naegenjiokgata


-Por favor quédate a mi lado, por favor quédate conmigo- Sus hombros temblaban sollozando

Nae gyeote isseojwo naege meomulleojwo


-Por favor no me sueltes a mí, la persona que toma tu mano

Ne soneul jabeun nal nohchi jimarajwo


-Si te alejas un paso más

Ireohke niga hangeoreum meoreojimyeon


-Yo puedo dar solo un paso para acercarme...

Naega hangeoreum deo gamyeon dwe janha


No fue una equivocación, solo sucedió...continuar solo no era lo suyo. Definitivamente se llevaría el sueño que tuvieron juntos. Dio una suave respiración cerrando los ojos con fuerza evitando no quebrarse...pero era tarde...lo extrañaba...lo quería...lo amaba, lo necesitaba. ¿Cómo puedes tocar el cielo cuando cometes un pecado? Un amor prohibido...pero un amor verdadero.

Las lágrimas pasaban por sus mejillas sin poder ser detenidas, no quería...no quería sufrir más, su rostro cayó sobre sus palmas sollozando más de lo que debía, más de lo que había sufrido en su vida, no podía, ya no quería seguir. Lloraba sin vergüenza, sin restricciones de que alguien lo oyera porque si...iba a ser su última vez.

¿Cómo podría vivir?

Si con solo repetir su nombre y pensar en su imagen no lo soportaba y lloraba en las noches frías. En ese tiempo sus palabras hicieron de su relación algo tan liviano pues no sabía que acostumbrarse a ellas y aferrarse dolería tanto, justo cuando había conocido su corazón dijeron un adiós tan inesperado lleno de pesar.

Ya no lo soportaba...

Conforme pasaban los días, el espacio vacío que le dejo el corazón se vuelve más grande, lo peor es que todo se convirtió en solo recuerdos. Él dijo que lo amaba...dijo que estaría a su lado...recordar sus palabras solo le rompía mas el corazón

-Es nuestro juramento...- Susurro uniendo su frente con la mía ambos cerramos los ojos disfrutando este hermoso momento

-Te amo...-Susurre

-Yo también te amo...


-Solo abrázame...-

Geunyang nal anajwo

Susurro aferrándose con fuerza en esas heladas barras mirando la gran altura del edificio.

Levanto el rostro aun llorando con la boca abierta y el frio cubriendo su cuerpo entero sufriendo con cada lagrima que pasaba por sus ojos rojos y su nariz rosada que le costaba respirar entre ese fuerte llanto que le destrozaba todo de él...

-Te amo...

Nan neoreul saranghae

Cantaba entre sollozos doliendo cada palabra...si hubiera podido decirlo más antes...si pudiera decirlas de nueva a él. Si solo pudiera ver de nuevo a Hoseok, si tenía que verlo...

Cerró los ojos y el sol renació, una sonrisa débil se reflejó en su rostro volviendo a sentir esa brisa delicada...y no lo dudo.







4/5 :"(

Suicides [V-Hope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora