Capítulo 2: La noche de la inauguración

124 24 9
                                    

Holly

Abro los ojos lentamente, la luz de la lámpara es muy fuerte, mi cuerpo está atado, me duele absolutamente todo. Me presionan la mano derecha, es mi padre que está a mí lado.

–Hey cariño –dice mi padre– ¡Estaba preocupado por ti! –Me tranquiliza que mi padre esté conmigo.

–¿Dónde estoy? –pregunto confusa. Parece una clínica–. ¿Por qué estoy amarrada? –Trato de desatarme.

–Tuvistes un accidente, pero ya estás bien cariño; te tuvieron que amarrar porque: inconscientemente tratabas de escaparte, y tirabas golpes a lo loco ¿No te acuerdas de lo que pasó?

Ya me acuerdo, recuerdo todo, la voz misteriosa, el espejo. Dios, todo esto me provoca un gran dolor de cabeza.

–¡Oye cariño, tranquila! no te esfuerce en recordar –objeta al sentarse en la cama.

–¿Dónde está la muñeca de porcelana? –pregunto confusa.

–No se de que hablas.

–La muñeca que tenía ayer en las mano, fue lo último que vi antes de desmayarme.

Puede parecer algo estúpido que pregunte eso, pero quiero saber cómo llegó a mis brazos, digo, no la tenía hasta que me lanzaron y caer al suelo con vidrios.

–Cariño, no fue ayer, llevas aquí 3 días –¡Qué rayos!– la inauguración de la Mansión Miller fue propuesta. Tuvistes un golpe súper fuerte en la cabeza.

En la habitación entra un doctor, parece de 34 años, lleva una bata blanca, de cabello negro.

–Despertó mi paciente pelirroja favorita –dice, logrando una media sonrisa en mi rostro– ya puedes ir y descansar en tu casa.

–Gracias doctor –agradece mi padre.

–Te llegaron visita, Holly –El doctor señala la puerta.

Veo entrar a James, Texa, Brandon, Rose, Marie Clare y Diana, con flores y regalos.

–Amiga, ¿cómo estás? ¿supistes que se rompió el espejo de tú cuarto? –manifiesta Diana mientras me da un fuerte abrazo.

–¡Aj! –suelto un suspiro de dolor.

–La estás lastimando, tonta –afirma Rose, pronunciando muy alto la última palabra–. Traje maquillaje, para arreglarte, porque dejame decirte que estás...

–Ella sólo quiere descansar, así que la esperamos afuera –ordena Texa y se lo agradezco con la mirada.

–Quiero hablar a solas con ella –pide James. Todos se van.

–Hey, ¿Cómo te encuentras? –dice, mientras está mirándome fijamente a los ojos.

Lo noto súper preocupado. ¿Por mí? O ¿Por...? No, no creo que haya sido él.

–Mucho mejor, gracias por venir James, es muy importante para mí...

–Para lo dos, Holly Miller – interrumpe– sé que he estado un poco lejos de ti, pero me importas mucho, más de lo que crees, pensé que te perdía, pensé...

James baja la cabeza, con la frente arrugada, cierra sus manos formando un puño. Yo se la sujeto.

–Pero no fue así James –Lo tranquilizo y sus facciones vuelven como antes.

–Además, tenemos 18 años de amistad, ¿acaso ya se te olvidó? –exclama con una sonrisa pícara.

–Cómo olvidar, cuando te ponias tonto, porque: te ignoraba con Texa; te ponias como nenita –bromeo entre risas– ah y cuando nos...

Holly [Misterio]Where stories live. Discover now