Vuelo hacia al destino.

Capítulo VIII

¡Feliz día del amigo!
Capítulo dedicado a @stellaamazingbook por ser mi Aita, mi luz y mi cristal👭👑💘. Eres más que mi amiga. Te quiero.

                 💞💞💞💞💞💞

Con la mirada busco a papá, Aita y Jorge. Los encuentro en la entrada del aeropuerto a cada con un cártel. Él de papá dice: Bienvenida mi reina y mi princesita. Él de Aita dice: Bienvenida mejor amiga y Sam. Él de jorge dice: Bienvenida mamá y hermana adoptiva. Veo a mamá y tiene una gran sonrisa al igual que yo. Dejamos las maletas y salimos a donde están ellos. Nós fundimos en un abrazo grupal y ellos dicen juntos:

—Las extrañamos.—

—Nosotras a ustedes.—Decimos mamá y yo.

Este es un momento perfecto.

Puede ser más perfecto si estuviera Alejandro.

Nós separamos y me abrazan Jorge y Aita. No puedo evitar reír y los abrazo con fuerza. Hasta que Jorge dice:

—No más abrazos. Me duelen todos mis músculos. Miren que me costó trabajo crear estas bellezas en el Gym.—

No puedo evitar rodar los ojos. Escucho cómo Aita le da un golpe y se empieza a quejar. Salgo de su abrazo y los miró. Aita trae sus lentes de montura que solo usa cuando lee mucho, una camisa y pantalones blancos y Jorge trae una gorra, camisa roja y pantalón negro.

—¿Puedes callarte? Espantaras a Lizzy.—Le recrimina Aita.—No lleva ni 10 minutos aquí y ya empezaras con tus dramas. Espera hasta más tarde.

Jorge hace como si no la escuchará y me abraza. Cómo extrañe a este par.

—Mi turno.—Dice Aita.

No puedo evitar reír, Jorge rueda los ojos y va en busca de mis maletas. Aita no pierde tiempo y me abraza de la misma manera que siempre lo ha hecho. Un abrazo de oso. La abrazo de vuelta.

—Te extrañé demasiado, mejor amiga.—Dice acariciando mi cabello.

—También te extrañe, mejor amiga.—Digo riendo

Jorge trae las maletas y me siento en una de ellas. Quiero dormir hasta el siglo 22. Aita esta hablando con su papá para dormir en mi casa hoy y Jorge me está hablando sobre todo lo que Aita le hizo hacer mientras no estaba.

—Enserió no puedo creer, que me obligará a leer el libro para luego ver la pelicula.—Dice él y luego le da un escalofrío.

—Si eres dramático.—Digo colocando mi bolso en el suelo.

—Además que falta la segunda parte. Quiero ver como continúa.—Dice ajustando su gorra.

No puedo evitar rodar los ojos. Jorge ama las novelas románticas. Él lo niega pero es verdad.

—Problema resuelto.—Dice llegando Aita y colocando un pie sobre la otra maleta.—Tengo el permiso. Noche de chicas.

No puedo evitar aplaudir. Tengo muchas cosas que contarle. Veo a Jorge y él rueda los ojos.

—Gracias por pensar en mí, cariño.—Dice haciéndose el dramático.

—Tú tienes que estudiar y hacer unos trabajos.—Dice Aita como si estuviéramos hablando del clima.

No puedo evitar reír otra vez. Jorge maldice en voz baja. A lo mejor olvido que tenía tarea. Conociendo lo aplicado que es, ya la tendría hecha. Pero complaciendo cada locura de Aita, se le olvidaría. Su teléfono suena, nós pide un segundo para atender y se aleja de nosotras.