Cap. 18

221 24 0
                                    

Y en poco tiempo se acercaron los exámenes empezando a dejar ver lo peor de Misaki.

–Ya-Chan, que le pasa a Misaki? –Preguntó Daiki una vez Misaki se negó en rotundo a venir con nosotros a merendar.

–Exámenes finales –Respondí comiendo con calma mi merienda.

–Es normal que este así? –Preguntó Riki nada convencido.

Tampoco había que ser un lince para saber que Misaki no estaba bien.

–Los padres de Misaki son extremadamente exigentes en sus estudios –Comencé a explicar con calma, al fin y al cabo solo Ren y yo lo sabíamos–, tiene que ser siempre de los mejores de su clase, sino sus padres le castigan severamente.

–Como de severos? –Preguntó Riki completamente tenso al escucharme decir eso.

–Depende de si intervienen sus tíos o no –Murmure esperando que este años sus tíos no estuvieran de vacaciones antes de tiempo.

El año pasado Misaki estuvo días sin poder sentarse recto.

–La relación en su casa entonces no es muy buena –Comentó Tora también tenso por lo que acababa de contar.

–No, hasta que pueda largarse de esa casa no –Conteste sintiendo hasta que perdía el apetito.

Y a demás dentro de poco tendríamos que hacer la prueba de acceso a la universidad, no tenía pinta de esperarle buenos tiempos a Misaki.

–Ya-Chan –Me llamó Daiki mientras terminaba mi labor de limpieza de la clase siendo el encargado de barrer.

–Dime –Respondí cogiendo ya el recogedor.

–Te queda mucho? –Preguntó sentándose en la mesa del profesor mirando lo que hacía mientras dos chicas comenzaban a colocar las mesas.

–No, espera un poco –Respondí sin poder evitar sonreír por su impaciencia infantil.

Pero era de las pocas cosas que me parecían tiernas de él.

En cuanto termine comenzamos a caminar hacia mi casa, como siempre, pero esta vez insistió en que fuéramos gateados de la mano.

–Nos pueden ver –Me queje completamente rojo tratando de no levantar la voz incapaz de dejar de mirar a todos lados–, una cosa es que lo sepan Ren, Riki y Misaki y otra que lo vean mis vecinos.

–Entonces quieres contárselo? –Preguntó soltándome la mano como yo quería.

Aunque a quien iba a engañar, me gustaba ir cogido de su mano, pero en mitad de la calle era incapaz de pensar en otra cosa.

–Lo estuve pensando... y supongo que no pasa nada –Respondí completamente tenso agachando la cabeza sin detener mi paso–, son ellos al fin y al cabo.

–No sabes cuantas ganas tengo ahora mismo de besarte –Susurro deteniéndome agarrándome por la barbilla y acariciando mis labios con un dedo.

Pero no lo hizo.

–Me gustaría que tuviéramos una cita formal una vez terminen los exámenes –Comentó casi cundo llegamos a la puerta de mi casa.

Yo me quede completamente petrificado y colorado, pero él se mantuvo firme y sonriéndome relajado como siempre.

–Por que de repente? –Dude sin saber que contestar.

–Bueno, siempre que quedamos es para comer en tu casa o por ahí, sino terminamos en mi casa haciéndolo –Respondió rascándose la nuca sabiendo que realmente era extraño para estar en una relación–. Me gustaría hacer más cosas a parte de eso, y así tendré ánimos para afrontar lo exámenes de la universidad.

Fin (Yaoi/BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora