No soy chica de una noche (Marco Asensio)

Noche de chocolate

- Mi amor, no me puedo creer que mañana sea nuestra boda- digo sonriendo y abrazando a Marco
- Pues así es mi vida. Es nuestro ultimo día de solteros, de novios. Mañana a estas horas ya serás la señora de Asensio Willemsen. - dice Marco dando un beso sobre mi cabeza.
- Está todo perfecto - digo sonriendo mientras miro a mi alrededor
- Hombre, tiene que estar todo perfecto para mi chica perfecta – dice Marco y me coge en volandas mientras no paro de reír.

Damos un ultimo vistazo a la finca en la que celebraremos la boda. Es verdaderamente bonita. Está a las afueras de Madrid , en medio de un bonito bosque. Tiene un pequeño lago y un mirador, donde se hará la cena y el posterior baile. Todo está ya perfectamente adornado e iluminado como elegimos. Es perfecto.

- Vamos, debemos ir a casa. Mañana hay que madrugar- dice Marco sonriendo y cogiéndome de la mano.

Asiento feliz y vamos hacia el coche.

Es oficialmente nuestra ultima noche de novios.

Llegamos a casa y vemos una enorme fuente de chocolate en nuestro salón y una enorme bandeja de fresas.

- y esto?- digo sonriendo
- Pues la verdad, no lo se – rie Marco.

Nos acercamos y vemos una notita. La cojo y río al leer lo que pone.

"Que paséis una dulce ultima noche de novios. I&S"

- Tenemos los mejores amigos del mundo. - rio
- Ha debido ser cuando recogieron a Rome- rie Marco conmigo
- Pues habrá que aprovecharlo no?- digo con una picara sonrisa mientras cojo una fresa y la mojo en el chocolate y me la como de manera sensual.
- Ufff señorita Ruiz.... - dice Marco acercándose a mi y cogiéndome de la cintura.

Aprovecho a que está distraído y mojo el dedo en chocolate y lo pongo sobre sus labios, y paso mi lengua por ellos haciendo que Marco solte un pequeño gemido y al momento comience a devorar mis labios y me coja a horcajadas.

Me deshago de su camiseta y le hago sentarse en el sofá. Cojo otra fresa y la mojo en chocolate. Me coloco encima suya y la pongo en mi boca. El no duda ni un segundo y se tira de nuevo a mis labios, mordiendo la fresa y besándome apasionadamente. Quita mi vestido y yo sus pantalones.

Vuelvo a mojar mi dedo en chocolate y lo reparto por su torso. Me vuelvo a colocar a horcajadas encima de el y empiezo a besar cada milímetro de su piel limpiando el chocolate, provocando que Marco se agite.

En un ágil movimiento me da la vuelta y se coloca encima de mi con cuidado y hace lo mismo que segundos antes he hecho yo.

- Estoy ansioso de que llegue mañana, de que seas mi mujer, mi esposa...- dice mientras besa mi cuello y retira la poca ropa que queda en mi cuerpo.
- Y yo mi amor....- digo agitada y quito sus boxers mientras beso su cuello.

Y entre besos , caricias y chocolate... mucho chocolate despedimos nuestra ultima noche de solteros.