Hijos del eclispse (TERMINADA)

Capitulo diez

-Shelley...

Me cuesta abrir los ojos, aunque no se porque, mi habitación carece de luz. Cuando por fin lo logro, veo a todos mirándome desde arriba, con todas sus caritas sonrientes celebrando me.

-Feliz cumpleaños!- gritaron al unisono, despertándome aun mas, y haciendo que me levante, sobresaltada.

Una vez que me calmo, les dirijo a todos la mas cálida de mis sonrisas, intentando ocultar mi cansancio y mi mal humor por haber sido despertada. Pero al cruzarme con los ojos de Zack, todo desapareció, al igual que su pasado. No podía creer lo mucho que el había progresado en tan poco tiempo. Nada parecía real.

-Bueno, bajemos!- grito Sophie desde su lugar, solo antes de correr escaleras abajo hacia la cocina con el resto de los pequeños.

Los demás los seguimos, y yo, mas atrás, intente despertarme lo mas posible. Sentí como de repente, la mano de Zack tomaba silenciosamente la mía, y como el calor subió por mis mejillas.

El resto del día fue tranquilo. Luego de tomar mi desayuno favorito (panqueques de miel, castañas y avena), salimos a recorrer el bosque para encontrar un lugar donde armar la festividad. Al encontrar un prado alejado con pocos arboles, instalamos las mantas y guirnaldas en algunos rincones, y nos mantuvimos allí el resto de la tarde.

Luego de comer, cuando el cielo empezó a caerse, encendimos la fogata, y comenzamos a bailar. Baile con toda la fuerza y libertad que este año me había dado, y agradecí mi nueva edad, mas cargada de sabiduría y paz para mi cuerpo. Baile como nunca lo había echo, y cuando compartí esta danza con Zack, cuando pude ver como el se liberaba, entendí que el ya era uno de nosotros.