Prologo.

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Draco Lucius Malfoy podría ser el chico perfecto de no ser por su gran problema, era un asqueroso y futuramente jodido omega, no es que tuviera algo contra los omegas especialmente porque su papi Remus lo era (el maldito se lo había heredado pero no la genial licantropía), a decir verdad le daba igual lo de los omegas, el problema es que él no deseaba ser uno, solo eso. Ah, tambien estaba ese problema... estaba enamorado de Harry James Jodido Potter quien no era otra cosa que un adorable omega demostrando nuevamente lo mala que era la suerte de Draco, en verdad que de todas las cosas que sus padres podían heredarle le heredaban lo que peor le sentaba como el gen de Veela por parte de su padre o el omega de parte de su Remus.


Harry James Potter era en verdad un chico afortunado, tenía dos padres cariñosos, una madre adorable, una lechuza perfecta, se sentía cómodo con su casta y luego estaba Tom, Tom era el alfa más lindo de todos los tiempos, un sueño húmedo de cualquier omega con sentido común y su novio que parecía solo tener ojos para él lo cual no podía tenerle más complacido. Su mejor amigo insistía en que Harry no podía ser tan feliz como aseguraba él, pero ¿que iba a saber Ronald Weasley, un beta? La verdad Harry no creía que mucho y menos cuando jamas había tenido el placer de besar a Tom por lo que Harry decidió no tomárselo muy en serio.

Omega Love StoryWo Geschichten leben. Entdecke jetzt