Blind | Yuta ゆた

33.

— ¿Sabes ponerte vestidos, cierto? — Pregunto Yang-mi a lo que So-Hyun asintió con la cabeza de manera tímida. — Bien, la madre de Yuta me aviso muy emocionada, no la había visto así luego de que viera a su hijo, hare mi mayor esfuerzo bonita. — Ambas sonrieron para así empezar.

Un vestido a otro, un color a otro. So-Hyun no podía ver qué tipo de vestido era el que se encargaba de cubrir su cuerpo, sin embargo, al escuchar las palabras que le decía Yang-mi eso le hacía saber que ese tipo de vestido no le quedaba bien.

—Probemos con este, es mi favorito. 

—Está bien. 

Nuevamente la chica comenzó a desvestirse mientras Yang-mi se encargaba de escoger un vestido para ella, la fiesta seria hasta la noche por lo que aún les restaban tres horas. Si Yang-mi quería sorprender a la madre de Yuta, haría su mejor esfuerzo en arreglar a So-Hyun.

— ¡Termine!

—Bien, allá voy. 

En cuanto Yang-mi escucho aquello, entro inmediato a su habitación, sus manos cubriendo su boca dejaron una impresión en la chica, se veía bastante inocente con ese vestido, pero también se veía demasiado linda, esto incluso alegro más a la chica.

— ¡Por Dios So-Hyun te ves muy linda! — Exclamo la chica acercándose a ella.

—G-Gracias... ¿Solo será esto?

—Claro que no, aún falta peinarte y ponerte algo de maquillaje.

—Yang-mi.

— ¿Sí?

—Sin maquillaje, por...por favor.

— ¿Puedo ponerte al menos algo de sombra y rímel? Es poco maquillaje, no te afectara mucho.

—Yang-mi... ¿Qué es el labial? Eh escuchado varias veces sobre él, ¿Puedes ponerme también?

—Claro. 

Ambas volvieron a sonreír, una hora basto para terminar de arreglar a So-Hyun,  algo de chinos en la parte de debajo de su cabello, labial rosado para  combinar con el vestido que utilizaba en estos momentos, el rímel negro sobre sus pestañas y la poca sombra que resaltaba sobre sus hermosos ojos miel solo la hacían notar más hermosa.

Sin embargo, una parte de ella deseaba que Jaehyun la viera de ese modo...

.    .    .

Desde  que ambas chicas llegaron a la gran casa de la Señora Lee, escucharon  ya varias personas a lo lejos, unas hablando demasiado fuerte y otras  riendo mientras sostenían una copa llena de vino, cerveza u otro tipo de alcohol, aunque claro, esta imagen solo la podía ver Yang-mi, So-Hyun se hacía cargo de escuchar y sentir.

— ¿Lista So-Hyun?

—Al parecer sí. — Dijo esta de manera tímida, cosa que causo que Yang-mi sonriera más.

—Entonces entremos.

Aviso y ambas chicas entrelazadas de los brazos, prosiguieron por caminar, entre más cerca estaban más se podía escuchar todo el ruido que había ahí. So-Hyun estaba más que claro que se encontraba nerviosa, era su primera fiesta en su vida, si, seria con Yuta, o al menos eso esperaría la chica.

Al entrar ambas al lugar, Yang-mi pudo notar ya la presencia de Yuta a lo lejos, el cual se encontraba sonriente junto con su madre, esto incluso le sorprendió, parecía que ambos llevaban una conversación cómoda.

— ¡Yuta! — Grito Yang-mi a lo lejos llamando la atención del anteriormente mencionado.

—Santo dios... — Hablo el chico por sí mismo al ver la figura de So-Hyun con ese vestido color rosado que combinaba perfectamente con el color de su piel, aquel labial y el poco maquillaje que traía simplemente la hacía ver —...perfecta.