Tranvía de Musas

Nuestra última vez

Nuestra última vez fue la mejor que la primera vez. Te explico...

Cuando tuvimos sexo por primera vez lo hicimos con amor, con deseo de complementar dos cuerpos en uno. Recuerdo con la pasión que me besabas, quemaba mis labios, tanto que mi boca se moría de envidia. Cuando tus manos recorieron cada espacio de mi cuerpo, que aunque tenía miles de defectos tu lograste callar a cada un de ellos.

Me tomaste como si fuera una diosa. Venerabas mi cuerpo, con la yemas de tus dedos hiciste un camino desde mis labios hasta llegar al lunar estacionado en mi pecho derecho. Mencionaste que era un lunar arrebatador que servía de perfecto anfitrión, que te invita a besar y apretar mi seno a tu complacencia. Nuestra primera vez...no puedo decir que fue mágica, la defino como una tranvía. Porque cuando dos personas hacen el amor por primera vez hacen un recorrido donde exploran y conocen lo desconocido.

Olvidar la primera vez que hicimos el amor, ¡Ja!.. jamás lo podré olvidar. Recuerdo que al cabalgar en tus pliegues me decías: " mírame" querías ver mis muecas, como cerraba los ojos mientras mis manos se apoyaban en tu pecho, subía y bajaba, intercambiaba el ritmo y jugaba a mi antojo con tu firmeza resbaladiza de tanto placer. Ja,ja, ja...me acuerdo cuando me diste una palmada en las caderas y dijiste: " cabrona montas mejor que un "Jockey" me causó tanta gracia, pero no dejé que eso me distrayera.

Cuando al fin nuestros cuerpos se pusieron de acuerdo para estallar en placer...te sentaste y abrazando mi espalda comenzamos a galopar desenfrenadamente hasta sentir como tu firmeza palpitaba en mí. Sentir tu sexo empapado de mis fluidos y su armonioso ruido que indicaba que el nectar logrado fue de la mejor calidad.

Nuestra transpiración era fruto de lo rico que cogimos esa noche. Tiraste de mi cabello y besaste mi cuello diciendo TE AMO...no sé si fue por lo rico que habíamos hecho el amor o porque de verdad sí me amabas, pero te juro que ese te amo me ató a tu alma, tirando las llaves y dejándome jodidamente enamorada no sé si de ti o de la forma en que me lo hiciste aquella noche de abril...

Por: Keila M.