~♡ Jack Dylan Grazer y tú ♡~

27. Nada cambiará.

Lo pensé una vez más.

- Quiero que estos últimos días lo pasemos como si nada fuera a suceder, como si lo nuestro no se fuera a acabar.

- ______, pasará - frunció el ceño - no quiero que nos ilusionemos.

- Jack, piénsalo, si la pasamos con miedo contando los días en lugar de disfrutar vamos a desperdiciar nuestro tiempo recordando anécdotas cuando deberíamos estar haciendo nuevas, desde ahora.

- Tienes razón, la pasaremos genial - sonrió.

Jack se estaba acercando para besarme pero el profesor entró al aula, nos detuvimos y miramos al frente. Jack tomó mi mano.

- Todo estará bien - susurró y apretó un poco más mi mano.

No quería que Jack se vaya, pero, si se acercaba el fin de año, fin de clases, significaba que todos se irían, Jaeden, Wyatt, Jeremy, Chosen, Finn, Lulu....,significaba que se iría Sophia. Todo lo malo estaba por venir y no quería que pasara eso, quería volver a él maravilloso día en que hablé por primera vez con Sophia, cuando caí encima de Jack, cuando los conocí a todos y me integraron en su grupo Cómo nadie lo hubiera hecho.

Sin darme cuenta la clase había terminado. Miré a Jack y estaba guardando sus cosas en su mochila. Parecía que se esforzaba en parecer tranquilo, pero no lo hacía bien, sus cejas fruncidas me hicieron sonreír.

- ¿Qué sucede? - preguntó.

- Nada, no pasa nada - seguía sonriendo, intenté calmarme y guardé mis cosas.

- Estuviste muy callada en toda la clase.

- Bueno señorito así deberían estar todos en una cla-se de matemáticas - me puse mi mochila y sonreí. Jack causaba esto, a pesar de que estuviera triste el me hacía sonreír.

- No es gracioso - intentó esconder su sonrisa - es un día lluvioso, todos están tristes, misterioso o amargados.

- ¿Desde cuando se puso esa ley? - fruncí el ceño sin borrar mi sonrisa - Yo digo que hagamos la diferencia.

- Tienes razón, pero si queremos hacer la diferencia entre todos - dio un paso acercándose a mi - tenemos que hacer lo que nadie ha hecho aquí - tomó mi cintura y apegó su cuerpo al mío, nuestras caras estaban tan cerca que sentía su respiración.

Yo miraba hacia arriba, porque claro él era un poco más alto. Sin darme cuenta estaba soportando la respiración así que solté todo de un delicado suspiro. Jack acero más su cara, si eso era posible, y juntó sus labios con los míos.
Me besó sin soltarme de la cintura, mis brazos corrieron a su cuello para sostenerme, no pude evitar sonreír en medio del beso.

- ¿Lo que nadie ha hecho eh? - el asintió con su cabeza sin dejar de besarme ni yo a él - ¿Sabes que los alumnos han hecho peores cosas en este salón de clases?

- Ya cállate - hablábamos sin dejarnos de besar, así que seguí con lo nuestro.

Por lo menos un minuto más porque Jaeden apareció. Cuando lo miré me despegué del dulce beso, Jack me miró y frunció el ceño, cuando miró a Jaeden supo por qué habíamos parado.

- ¿En serio Jaeden? - parecía irritado y no había soltado mi cintura.

- Si, dios, lo siento - tomó una maleta del aula - Wyatt me lo había dicho, es asqueroso, WYATT ME LO HABÍA DICHO - gritó.

- Si, si, ahora puedes irte, estamos en medio de algo - movió su manos.

- No, ya es tarde ¿Jae estás en clase de ciencias cierto?

- Si, pero puedo inventar una excusa por ti.

- No - miré hacia Jack que fulminaba con la mirada a Jaeden - me tengo que ir a clase - le di un pequeño beso en los labios haciéndolos quedar en trompita - adiós - me solté de sus manos y caminé hacia Jaeden.

Salimos del salón y caminamos por el pasillo.

- _______, siento eso, de verdad no quería interrumpir.

- No hay problema, me salvaste la vida, había olvidado que era tarde - le sonreí.

- Genial.

(...)

Cuando llegué a casa me encontré a Finn en mi puerta sentado y mirando sus zapatos. llevaba una remera negra con un estampado de un gatito, unas vans y una gorra.

- Linda camiseta - sonreí al verlo saltar del susto.

- Oh mierda, me asustaste maldición - se levantó y sacudió sus pantalones.

- ¿Qué haces aquí? - no borré mi sonrisa.

- ¿me estás echando? - puso media sonrisa. Maldito seas Finn.

- ¿a qué se debe su agradable visita mi querido actor y músico, Finn Wolf hard? - dije sarcástica.

- Mucho mejor, aunque lo podrías hacer mejor.

- Imbécil - empujé su hombro.

- Quería hablar contigo - metió sus manos es sus bolsillos.

- Claro - me volteé para abrir la puerta de mi casa - ¿MAMÁ? - grité al entrar.

- Hola hija - caminó hacia nosotros - ya encontré tu crema de las urti...

- Si si mamá gracias - le hice unas señas con los ojos de que Finn estaba presente.

- Oh, hola, ¿Finn cierto? - miré hacía Finn quien estaba intentado no reír fuerte por lo de la crema. Revolee los ojos.

- Si, un gusto conocerla - sonrió Finn - soy amigo de _____, vine a hablar sobre una tarea de - me miró burlándose - química.

Imbécil.

- Estaremos en la cocina mamá.

- Está bien, yo estaré en mi oficina si necesitan algo, tu padre hoy trabaja hasta tarde - hizo algo parecido a un puchero con su boca y se fue.

- ¿cremas de urticaria? - se burló.

- Cállate, no es tan malo como para hacer una broma - junté mis cejas y me crucé de brazos.

- Si claro - dijo sarcástico, no tenia derecho a burlarse porque yo tenía razón, no tenía sentido hacer bromas de la urticaria - vamos a hacer lo de química - me guiñó un ojo.

Revolee una vez más los ojos y lo seguí Hasta la cocina.

- Bien, ¿de qué quieres hablar? - Finn ya estaba sentado en una de las sillas de la barra.

- Bueno, ya que al parecer soy el único inteligente del grupo tengo que decirte que no sé si haz pensado en que a final del año..., nosotros, todos, nos iremos - bajó la mirada.

Me había llegado al corazón que se preocupara en decírmelo, pero claro no iba a demostrarlo, intenté ocultar mi sonrisa.

- Ya lo había pensado, sólo que no me imagino como nos sentiremos, yo más que todos - suspiré - ustedes se tiene entre ustedes, pero yo me quedaré sola maldición.

- Tranquila, ______ nosotros luego de terminar de grabar nos separaremos, será lo mismo pero con una diferencia - me sonrió - no habrá nada que nos aleje, bueno no literalmente, nada hará que dejemos de ser los mejores amigos, seguiremos en contacto, hasta iremos dónde sea que estés para juntarnos.

Todo lo que Finn había dicho era cierto, tal vez podía funcionar, nos podríamos juntar en vacaciones y todo sería normal, como siempre. Pero estaba Jack, mierda, ¿Jack tenías que llegar a ser algo tan importante para mi? Sabía que tarde o temprano nos separariamos peros estos meses pasaron tan rápido.

- Tienes razón - me obligué a sonreír. Porque, maldita sea, estaba feliz por lo que había dicho pero aún pensaba en Jack.

Finn me hizo unas señas para abrazarlo y corrí a hacerlo, recosté mi cabeza en su pecho y no pude evitar pensar y recordar todo, absolutamente todo por lo que habíamos pasado, algo que jamás se repetiría, algo especial que sólo lograbas sentir con ellos.