Unicornios ☆Joerick☆

Reglas →←

Joel estaba escondido detrás de los botes de basura una vez más, observaba desde ahí al pequeño ojiverde que lo buscaba desesperadamente.

De verdad le daba miedo.

Aparte de intenso e insistente estaba también loco.

Cuando lo vio alejarse se levantó del suelo, limpió la tierra de sus pantalones y corrió hacia su casa.

Llegó a la vivienda un poco agitado y abrió la puerta con su llave contento por haber escapado esta vez de Erick, pero su felicidad le duró poco cuando vio al ojiverde sentado en la sala.

Retrocedió unos pasos intentando volver por donde vino pero Erick notó su presencia y fue más rápido. Corrió hasta él y lo abrazó fuertemente.

-Joel, te estuve buscando en la escuela, ¿por qué no me esperaste?- hizo un tierno puchero al terminar de hablar.

-¿Por qué tendría que hacerlo?- dijo evitando mirarlo al rostro, era demasiado tierno.

-Por que siempre volvemos juntos.

-No creo que volver juntos sea igual a que tú me sigas en contra de mi voluntad.

-Es igual.

-¿Por cierto que haces aquí? Tú estabas hace unos minutos en el patio de la escuela buscándome.

-Existen los taxis.- rodó los ojos -Quieres decir que ¿me evitase a propósito?- dijo ofendido cuando se dio cuenta de lo que habia dicho el rizado.

-Vete, tengo tarea que hacer.- dijo Joel dispuesto a subir a su habitación pero Erick lo detuvo, le empujó a la pared y lo acorralo ahí.

-Mira Pimentel, he soportado tu mal humor, tu indiferencia y que finjas no conocerme en la escuela- empezó a hablar desafiante con una voz gruesa que el rizado jamás había escuchado. -pero se acabó, desde ahora habrán reglas entre nosotros.

-¿Por qué crees que voy a obedecerte?

-Por que por si lo olvidaste yo sé tu secreto cerebrito.

El pequeño tenia un buen punto y una gran estrategia no había duda, Joel estaba frito.

Tragó secó, Erick estaba demasiado cerca, el pequeño descarado tenia su vista pegada en los labios del rizado y este desvío la mirada nervioso. Solo escuchó la leve risita triunfante que soltó Erick mientras se separaba de él.

-Vayamos a ver una película.- dijo como si nada con su usual voz aniñada mientras subía las gradas.

Joel veía como el ojiverde subía hacia su habitación y a la misma vez sentía a su corazón latir aceleradamente. Él sabía que no era el susto, al contrario el motivo era algo bonito, algo que despertaba poco a poco en su interior.

Y aunque se negara admitirlo se sentía demasiado bien.

-¡Pimentel, sube de una buena vez antes de que baje por ti!- los gritos de Erick lo hicieron salir de sus pensamientos y corrió apresuradamente a su habitación.

De verdad Erick le daba miedo.

Estoy teniendo problemas con wattpad no me salen los capítulos que publico tampoco me sale la nueva historia que publiqué. Todo esto me está desesperando, si hasta mañana no logro solucionar estos problemas, voy a eliminar la nueva historia y publicare capítulos de mis demás fics cuando encuentre una solución. Deseenme suerte bye, bye.