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—Oppa... —susurró Jimin—. ¡Ahh! —gritó frustrado—. Realmente suena estúpido, ¿cómo se lo pudo decir Jin hyung a Namjoon hyung? —murmuró para sí mismo y frunció sus labios inocentemente. Se levantó de la cama y se preparó para salir con Seokjin a comer, como el mayor había prometido.

No. Jimin no los entendía. Tampoco quería entenderlos, pero extrañaba a Yoongi. Lo extrañaba tanto. ¿Es qué acaso no podían hablar y ya? Todo esto había empezado por el estúpido pedido de Yoongi, de que Jimin, lo llamara "oppa". Era tan patético.

Se lo diría, pero ¿y si no sonaba tan lindo como una chica? ¿Y si Yoongi al final pensaba que realmente era estúpido sólo para dejarlo en ridículo? Ah... eran tantas las cosas en las que Jimin pensaba y todas terminaban en una sola respuesta: Jimin tenía miedo.

Era un idiota con miedo. Miedo al rechazo, miedo a sentir vergüenza, miedo de perder a Yoongi. Y si, sonaba patético que Park Jimin sintiera miedo o se replanteara eso sólo por el hecho de llamarlo "oppa", al fin y al cabo es solo decírselo, ¿no? Era tan tonto...

Tanto Namjoon como Taehyung, Jungkook o Jin le han dicho lo mismo: que hablen y se lo diga sin pena. Y Jimin sólo pensaba que era más fácil decirlo que hacerlo.

Imbécil. Eso era, o al menos, así se sentía: como un imbécil. Lo repetía mil veces en su cabeza.

Extrañaba a su novio y no quería hacer lo único que en todo lo que llevaban de relación le había pedido. ¿Irónico, no?

—¿Estás bien?

Jimin salió de sus pensamientos ante el llamado de SeokJin y metió un bocado de ramen en su boca.

—¿Eh? Ah, sí.

—Te noto tenso —respondió el mayor, al notar que el rubio volvía a parar de comer.

La gente pasaba detrás de ellos al estar en un puesto de comida rápida en el centro de Seúl. Ambos disfrutaban de la comida, no lo negaban, pero Jin solo había salido con Park para sacarlo de su mundo y que se depejara. Para que se olvidara, al menos un rato, de Yoongi. Pero al parecer eso no había funcionado y se apenó inconscientemente por no ser de gran ayuda.

—Estoy bien, solo pensaba... —murmuró y volteó su vista a la plaza a sus espaldas—. Lo siento, hyung —Seokjin negó con la cabeza y arregló unos mechones del cabello de Jimin con una leve sonrisa.

—¿Piensas en Yoongi, cierto? —Jimin asintió algo apenado—. Últimamente solo piensas en él —contestó con una risa y suspiró.

—Soy un idiota, ¿cierto?

—¡No lo eres, mi Mochi! —chilló Jin rápidamente dándole un abrazo sorpresivo al menor—. No eres idiota por quererlo —murmuró con voz apenada sobre la cabeza del rubio. Jimin se tensó. No podía, no quería, y se estaba aguantando las ganas de llorar, pero sus ojos escocían y no lo soportaba.

—L-Lo siento —susurró con la voz ahogada.

Seokjin negó rápidamente con la cabeza—. Sólo hazlo; sí así te sientes mejor, hazlo. Quiero serte de ayuda al menos un poco.

Jimin terminó por romperse. Lloró estrujando la chaqueta color rosa del mayor entre sus manos. Lloró por Yoongi, por que lo extrañaba y lloró porque no lo soportaba más. No soportaba no estar con el mayor. Extrañaba sus abrazos, sus pucheros inconscientes, su risa, cuando se frustraba por no terminar una canción, abrazarlo luego de ganar un premio, extrañaba cada parte del cuerpo de Yoongi, la manera en la que lo tocaba, le hablaba o besaba. Extrañaba a Yoongi y ya no quería negarlo, no podía negarlo y se odiaba tanto por eso.

Vivían en el mismo lugar y parecían completos desconocidos que sólo discutían por algo estúpido como llamarlo "oppa", ¿es qué acaso eran niños de primaria?

Si Jimin era estúpido, Yoongi lo era aún más.

—¿Estás mejor ahora? —preguntó Jin cuando Jimin dejó de llorar y se limpió las lágrimas que reposaban en sus mejillas con las mangas de su jersey.

—Si, lo estoy —contestó—. Gracias, hyung.

Jin negó con la cabeza nuevamente y respondió: —¿Vamos a casa?

Jimin asintió y ambos terminaron de comer para ir al departamento, donde ambos vivían juntos con todos los demás.

—¿Estás seguro de que estás bien? —Jimin asintió.

—Lo estoy —afirmó—. Creo que viene siendo momento de dejar de ser un miedoso y afrontar las cosas, ¿no? —respondió y Seokjin paró su paso. Jimin se giró y observó las acciones del mayor quien aún le daba vueltas a lo que había dicho el rubio.

—¿Qué estás pensando hacer, Park Jimin? —preguntó algo preocupado y confundido.

—Arreglar las cosas con Yoongi.

Jin asintió y rió siguiendo el paso del rubio para ir al departamento.

Oh sí. "Arreglar las cosas con Yoongi" fue lo que respondió, pero era más que eso, mucho más que eso. Quería atacarlo también.

Ya venía siendo hora de dejar de llenar su mente de pensamientos que no iban a hacer nada más que asustarlo.

Si no quería seguir teniendo a Yoongi lejos de él debería afrontarlo, y Jimin, lo haría de la mejor manera.

‧₊˚ ⋅  𓐐𓎩 ‧₊˚ ⋅

¡Se prendió esta wea!

—V. 💌

Mejor llámame oppa © 𝗬𝗼𝗼𝗻𝗺𝗶𝗻 ✔️Where stories live. Discover now