¿Enamorada de él?

Capitulo 59. El fúturo no se planea.

Narra Lia.

Me había despertado con solo ropa interior y una camiseta de manga larga blanca que seguramente fuese de Izan. Lo último que recordaba era la imagen de Izan mientras yo lloraba sobre sus piernas en el baño de la habitación. Busco con la mirada a Izan pero no se encuentra en la cama.

-Izan?- digo con la voz entrecortada. Me daba miedo el no volver a verle después de lo sucedido de anoche pero todo cambio cuando...

-Buenos días, pequeña.- dice Izan entrando en la habitación con una bandeja con dos tazas de café, dos vasos con zumo de naranja y bollos.

-Buenos días.- digo con la voz entrecortada. Me resultaba imposible reprimir las lágrimas y la angustia que sentía dentro y lágrimas caen por mis mejillas.

-Ei, que te pasa?

El chico se sienta en su lado de la cama y me abraza pegándome a su cuerpo.

Seco mis mejillas y después de calmarme comienzo a hablar.- Después de lo de ayer a la noche en el baño y no verte aquí en la cama conmigo supuse que te habrías ido y no te volvería a ver.

Izan besa mi mejilla.- No sabes si estás embaraza y si ese fuese el caso estaré contigo en todos los momentos, eres mi novia y te quiero.

Suspiro y me dejo caer en la cama de nuevo apollada en el pecho de Izan.

Horas más tarde...

Narra Maite.

Sofi y yo estabamos solas en el salón y en el resto de la casa ya que Austin y Pedro se habían ido a casa de Lucas a pasar la tarde.

-Crees que estará embarazada?- digo con cierto nerviosismo observando la imagen de Lia y Izan riendo desde el coche de Sofi mientras daban "clases" de conducir.

-Los mareos y lo de ayer a la noche...

La verdad era que Izan no había dicho a nada pero cuando Sofi y yo hibamos a avisar a los chicos para la cena, habíamos escuchado los vómitos de la chica y el comienzo de la conversación.

-Es que son muy jóvenes como para que vayan a tener un bebé. Que pasa con el fúturo que había planeado desde pequeña?

Me siento en uno de los sillones del salón y suspiro.

-El fúturo no se planea, Maite.- dice cogiendo mi mano.- Ella y el son mayores como para saber lo que hacen y podrá estudiar mientras cuida al bebé.

Asiento ante la respuesta de Sofi. Lo que no sabía era que la chica que estaba en el coche con su novio sentía lo mismo.

Narra Lia.

-Te das cuenta de que si estoy embarazada, nuestro futuro cambiará completamente? Es decir, estoy segura que yo no soy la única que desde pequeña ha planeado su futuro y tu seguramente también lo hayas hecho pero...- estaba sentada en el asiento del conductor y Izan estaba sentado sobre el asiento del copiloto, estaciono el coche delante de la puerta de la casa de mi tia Sofi y apollo mi espalda en el asiento.

-Me he dado cuenta y sabes? Haría cualquier cosa por ti y por el bebé, entiendes? Pronto sabremos las cosas y si estás embarazada pues sí, nuestros planes cambiarán pero seré feliz porque tu serás la madre del bebé y si es no pues, no seremos padres y seguiremos con nuestros planes.

Miro a Izan por el rabillo del ojo y muerdo mi labio inferior para evitar una sonrísa. Me estiro hasta el asiento del copiloto donde estaba sentado el chico y le beso.

-Te quiero.- digo después de morder el labio inferior de Izan.

-Piensas que yo no?- dice Izan con el ceño fruncido.

Hago una mueca y rio, Izan no tarda en hacerlo al igual que yo.

Horas más tarde...

Narra Lia.

Después de nuestras "clases" de conducir, habíamos vuelto a casa de Sofi para cambiarnos para la cena de presentación. En esta cena, hoy mi tia nos presentaría a su futuro marido, Mario. En la cena estarían mis abuelos y mi primo.

Salgo del baño con un recogido dejando dos trozos de flequillo a cada lado de mi cara en tirabuzón, mi cara estaba más maquillada de lo que era habitual y hiba vestido con un vestido azul celeste de solo una manga, unos zapatos de tacón abiertos color crema y un bolso color crema en forma de sobre.

-Waow.- dice Izan observándome de arriba a abajo.

Suelto una carcajada.

-Gracias.- digo con una de mis mejores sonrisas.

Doy un beso al chico y cuando nos separamos me apollo contra la ared rosa de la habitación, me había vuelto de marear y durante el día no había pasado ningún otro mareo.

-Te encuentras bien? Si quieres nos quedamos aquí.- dice Izan sentándome en la cama.

-No hace falta, ya se me ha pasado.- digo con media sonrísa.

Bajamos al piso de abajo y en el salón están mis abuelos que hablan con otras dos personas, un hombre y una mujer que al parecer son un matrimonio. Mi primo está jugando con Austin, era un año más mayor que yo y le encantaba pasar tiempo con mi hermano, era como un hermano para el.

Entrelazo mi mano con la de Izan y busco a mi tia y a mis padres que seguramente están juntos, y no me equivoco cuando veo a mi tia acompañada de un chico alto, con el peló castaño hacía arriba que viste con una camiseta blanca y un pantalón gris. Nos acercamos hasta ellos y les saludamos.

-Os presento a mi futuro marido, este es Mario. Mario, estes son mi sobrina y su novio.- dice Sofi presentándonos.

Dos besos con un Encantada y nos separamos.

-Ven, te presentaré al resto de la familia.- digo tirando de Izan.

Caminamos hasta donde está mi primo y mi hermano y tapo los ojos de mi primo con las manos.

-Tu eres quien tiene una prima sexy?- digo sonríente. Izan suelta una carcajada.

El chico castaño se separa y me levanta del suelo abrazándome.

-Que tal?- digo después de que me baje al suelo.

-Genial y tu?

-Igual. Te presento a Izan, mi novio.

-Cuidado con ella, está un poco loca.- dice rindo a Izan.

Suelto una carcajada.

-Ya me he dado cuenta.- dice Izan.

Sonrío ante el comentario y hablamos con Adrián, mi primo.

-Y para cuando la boda?

Izan y yo nos miramos.

<<Boda no pero bautizo puede que sí.>>

-De momento aún no.- dice Izan.

-Uh, de momento.

Suelto una carcajada y tras despedirnos de mi primo hablamos con mis abuelos, mi abuela ya le había cogido cariño a Izan desde el minuto cero.