-Capítulo 12- De vuelta con la manada.

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¡Al fin arregle lo de los separadores! :D -Coffee Happy-

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Sus piernas dolían, pero lo ignoraba, su espalda se pegaba firmemente a la puerta cerrada, su mano cubría su boca mientras escuchaba los pasos en la baldosa pulida, alejándose de su posición

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Sus piernas dolían, pero lo ignoraba, su espalda se pegaba firmemente a la puerta cerrada, su mano cubría su boca mientras escuchaba los pasos en la baldosa pulida, alejándose de su posición.

Era la cuarta vez que casi es descubierta, el edificio era relativamente grande por lo que ve, lleva tres pisos recorridos sin señales de Izuku por ninguna parte, el blanco pulido comenzaba a causarle dolor en sus retinas y lo parecido de los pasillos estaba mareándola.

Cuando ya no pudo escuchar los pasos de los dos hombres que avanzaban se permitió relajar su cuerpo un momento, respirando profundamente para calmarse, debía continuar, las escaleras no quedaban tan lejos y ese piso había sido completamente revisado.




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El cuerpo cayo seco al suelo, las blancas baldosas ensuciándose con la sangre fresca, sus pisadas marcadas por el vital líquido. A su espalda escuchaba al trio de idiotas forjar la cerradura de la gastada puerta, en tanto él se encargaría de cualquier imbécil que pasara por ahí.

Pateo uno de los cuerpos, quizás muertos, quizás inconscientes, para avanzar donde estaban los betas preguntándose por que les tomaba tanto tiempo. Un candado, un puto candado, Kaminari trababa de abrirlo con un clip de cabello doblado ¿de donde salió? No planea preguntarle al cara de imbécil.


Molesto se devolvió a los cuerpos tanteándolos, buscando entre las telas de estos. Kirishima pregunto a su espalda que hacía, no contesto solo se centro en buscar lo que necesitaba de esos cadáveres o cuerpos inconscientes.

Sonrió satisfecho cuando en el tercer cuerpo encontró el tan ansiado objeto, se levantó caminando con dirección a la puerta.


●Desertic days and rotten meat● 〚Katsudeku〛Où les histoires vivent. Découvrez maintenant