28.2 breathe

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Este capítulo es muy corto, sí, la continuación del otro que creí necesario darle su propio espacio. Producto de canciones sad. ¿Mina y Nayeon están juntas? Descubranlo mis primorcitos.

📌

Mina había practicado muchas veces todo lo que explicaría y pensó que estaba preparada, pero al tener a Nayeon frente a ella, mirándola con curiosidad por su repentino silencio la hizo carraspear y enredarse con sus propias palabras.

— ¿Es cierto que tú y EunHa...? — La mayor no pudo ni terminar la pregunta porque muy dentro de ella se imaginaba la respuesta y le dolía, claro que lo hacía.

— Sí. — respondió, y se apresuró en tomar la mano de Nayeon para besar el dorso de esta. — Pero no es algo que yo... o ella planeamos.

— No lo entiendo, ¿cómo? ¿por qué? ¿por qué no me lo dijiste desde un comienzo?

Era una larga explicación, empezando con el matrimonio arreglado de Kai y terminando con la sucia jugada que su padre había hecho mostrándole fotos fuera de contexto a Nayeon sólo para asegurarse que la relación que ambas tenían terminara. Pero a pesar que la coreana podía imaginarse muchas cosas, jamás se le ocurrió que la propia estabilidad de su familia estaba en juego. Decir que no le importaba era mentir, porque además de Mina, sus padres eran lo más preciado que podía tener en su vida, y verlos arruinados o rotos no podría soportarlo.

Entonces, ¿todo quedaba en sus manos? ¿ella decidíaa si seguir o terminar definitivamente todo? No podía creer que un hombre podía sacrificar la felicidad de sus propios hijos sólo para duplicar su dinero, sin mencionar que eran métodos muy anticuados para lograrlo. Definitivamente había una gran razón para hacerlo. Mientras tanto, frente a ella tenía a una afligida Mina que esperaba algo, una palabra, una oración, lo que sea. La japonesa sólo era una víctima más, al igual que Kai, y eso le dolía; le dolía saber que todo lo que en algún momento soñó junto a su preciosa pelirroja se estaba nublando.

Tenía un solo camino:

Jugar el todo por el todo, teniendo la esperanza de que con el tiempo las cosas podrían tomar el orden correcto, poniendo en jaque a su familia; de tan sólo imaginar que Akira arruinara a sus padres su piel se erizaba y la hacían sentirse culpable por elegir su felicidad por sobre la de ellos, sin embargo, seguiría al lado de Mina, sabiendo que EunHa podría ser un gran de ahora en adelante. Todo era incierto.

O... todo lo contrario. Obligarse a dejarla ir, pensando que Jihyo podría tener razón al decir que Mina no era esa persona con la que pasaría el resto de su vida.

Nayeon se debatió mentalmente lo que debía hacer, mirando sin expresión a cualquier dirección.

Su mano temblorosa la alzó para acariciar la mejilla de la menor, tomando el valor de verla a los ojos y notando de inmediato el dolor que estos reflejaban. Se reconfortó cuando los brazos de Mina la rodearon y eliminó toda distancia entre sus cuerpos, no podía medir la gran emoción que su corazón sintió al volver sentir esa calidez que emanaba la pelirroja. Fue como si volvieran al primer día, donde se volvían torpes al ser novatas en una relación seria. Los húmedos y suaves labios de Mina se posaron sobre los suyos, compartiendo después de lo que pareció una eternidad un tierno y pausado beso.

Sus labios con los ajenos se sincronizaron a la perfección por largos segundos, sintiendo de vez en cuando las saladas lágrimas que se deslizaban sobre las mejillas de Nayeon.

Cuando el aire en ambas faltó, juntaron sus frentes mientras cerraban sus ojos, fundiéndose en el abrazo que deseaban no terminar jamás.

— Mina...

— Lo sé... — Tomó un gran respiro. — Lo sé.

La japonesa besó los labios de su coreana una y otra vez, antes de finalizar con uno sobre su frente.

Antes de que Nayeon partiera hacia la casa zeta, ambas se sonrieron como lo solían hacer cada vez que se despedían meses pasados. La única diferencia, es que con esa sonrisa, esos besos y ese abrazo, ambas finalizaban su pequeña historia.No fueron necesarias palabras, tal vez, sólo tal vez ni podrían pronunciarlas.

Mina observó a Nayeon hasta que esta se perdió en la oscuridad y cuando supo que ya no había nadie cerca, perdió la poca fuerza que le quedaba, sus rodillas colisionaron con el césped, sintiendo que su respiración empezaba a hacerse más pesada a cada segundo que pasaba. Su mente todavía no lograba comprender que al final, todo había terminado.

↳ Greedy ┇ MinaYeon - G!POù les histoires vivent. Découvrez maintenant