Capítulo 13

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A Clark le costó muchísimo enfrentar su pasado y le pedí a los chicos se hicieran cargo de ella un rato. Seth se estaba haciendo un gran amigo suyo, la acompañaba en todo, la cuidaba y le pedía historias de cuando era niña. Supe la intención de mi hermano al instante, mantenerla distraída. Me sentía realmente apoyada con su presencia, agradecí no haberlo rechazado. Pues al quedarme tranquila de que ella no estaba sola, podía encargarme de lo demás. Seth, Anabelle y Clark estaban afilando las espadas y dejándolas en condiciones, además de prepararnos protectores. No servirían de mucho contra los láseres pero algo podrían hacer. Fuimos al patio de atrás de la casa y entre los árboles que habían crecido frente al abandono, hicimos tumbas. Travis y Vladimir trasladaban los cuerpos con una camilla improvisada y una vez les dimos sepultura a todos, me aparte de los demás para tomar una piedra y acomodarla frente a dos tumbas. Tomé una daga que traje encima y escribí los nombres el rey y el príncipe. Pusimos los cuerpos en sus lugares y los cubrimos de tierra. Cuando terminamos, envié a Vladimir en busca de Clark. La vi aparecer y acercarse con los ojos llenos de lágrimas. Noté a Clark mirar con dolor la escena y tomé su mano para llamar su atención.

"Como soy comandante me encargaré de darles sepultura. ¿Estás de acuerdo?"

Me miró y asintió. Me alejé y tomé unos tréboles que había en el piso. Esparcí sobre las tumbas y me quedé de pie a un costado, frente a todos ellos. No tuve que hacerle seña a Seth, se acercó a Clark y le tomó la mano. Vladimir hizo lo mismo con su mano libre.

"Estamos aquí reunidos, para darle finalmente descanso eterno a su majestad, el Rey Sagniere y su alteza, el príncipe Phillipe." Miré a Clark y su labio tembló al tiempo que las lágrimas caían y no le quitaba la mirada a los nombres que había tallado. Tragué saliva, recordando el funeral de mi padre y seguí. "Estamos frente a la princesa Lysianne Sagniere, también conocida como Clark Müller, quien finalmente podrá cerrar un ciclo ante tal tragedia."

Clark levantó la mirada y me observó. Me asintió y sus ojos brillaban más allá de las lágrimas. Había entendimiento, agradecimiento y amor. Agaché la mirada, recordando a mi padre y como me sentí realmente sola cuando todo eso sucedió. Tomé unos tréboles que había detrás de mí y los lancé a la tierra con muchísimo dolor.

"Hoy, en este día, le doy cierre a la tragedia de mi padre, el Comandante Karl Müller y finalmente doy inicio a mi vida junto a mi esposa y mi hijo."

Observé a Clark y Seth, ambos me sonrieron emocionados y asintieron. Una vez dije eso, todos tomaron tréboles y los lanzaron. Nos quedamos de pie unos minutos y cuando notamos, el cielo se puso oscuro y se largó a llover, regresamos al palacio. Habían ordenado un poco el comedor y nos sentamos para comer y organizar lo que haríamos. Clark estaba realmente decidida, decidió que esta noche comenzaría a enseñarnos a usar las espadas y que por seguridad ante el embarazo, ella llevaría un arma de fuego antigua. Luego de hablar detenidamente con ella anoche, aceptó que sirviera de guía y se quedara con Seth sin ingresar al campamento Jark. No quería arriesgarla, cualquier tipo de riesgo, lo tomaría personalmente.
Una vez que terminamos de comer, dispusimos las espadas sobre la mesa y Clark nos miró a todos.

"No voy a comenzar con tecnicismos, iré directo al grano. Pero necesito que tomen estas espadas de madera de aquí antes."

Tomamos todos cada una y se dispuso delante nuestro.

"¿Qué hacemos?"

Le dije y sonrió mientras me señalaba con la espada de bamboo.

"Atáquenme."

Me sorprendí de que dijera eso, pero sonrió.

"No vamos a atacarte, Clark."

"Sí, vas a hacerlo. Seth... atácame. Con todo lo que tengas."

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