Todos sueltan fuertes y alegres gritos mientras aplaudían eufóricamente cuando Millie sopla la últina vela de las quince que había en el gigantesco pastel.
-¡EHHHHH!-celebran todos con emoción mientras que la cumpleañera los miraba, ella alzó los brazos cerrando los puños. Y todos callaron.
-Las velas, ya fueron sopladas-dice alzando las cejas, todos la miraron con atención, sonrió-¡Entonces que empieze la fiesta!-
-¡WOOOOOO! ¡SIIII!-
Música empezó a sonar fuertemente en las bocinas instaladas tanto dentro como fuera de la mansión.
Una canción sonaba mientras todos la bailaban alegrenente. Lilia, Sadie y Millie movían sus brazos con sonrisas mientras que los chicos tan solo estaban sentados y moviendo un poco sus pies.
Algo cerca de ellos, se encontraban Asher y Camila sentados en uno de los muebles de la sala, solos.
-¿Por qué no bailamos?-preguntó el confundido.
-Sabes que la música electrónica no es lo mío-niega ella encogiéndose de hombros.
-No, lo tuyo es el dembow-dijo divertido.
-Exacto-sonríe mirándolo-Pero no importa, es de Millie el cumpleaños, no mío-dice restándole importancia.
-Ay que linda-el le da una fingida sonrisa y se la devuelve, el mira tras de ella y abre sus ojos como platos-Ok, voltéate, pero no te asustes-pide.
La latina frunce el ceño esperándose lo peor y volteó la cabeza con lentitud. Encontrándose con lo peor.
Kendall Vertes ya se encontraba en la fiesta de cumpleaños, y con una sonrisa se dirigía hacia donde la cumpleañera.
-Ugh-emite Camila con pereza, mirándola.
-¡Millie!-chilla Kendall abriendo sus brazos de par en par, esta voltea y al instante disimula una mueca de terror, sonriéndole y abrazándola.
-Kendall, hola-sonríe asintiendo.
-¡Ah! ¡Es una fiesta HER-MO-SA!-dice abriendo los ojos en grande.
-Oh, gracias-dice asintiendo.
Kendall comenzó a decirle tantas cosas a la vez que los ojos de Millie tan solo se perdieron en una dimensión cósmica en el techo de la casa.
-Vaya, ojalá que no mire hacia acá-murmura Asher mirando a su mejor amiga.
-¿Por qué tuvo que venir?-se lamenta con el ceño fruncido.
-¿Te quieres ir?-sugiere el.
-No no, aún no han puesto dembow-bromea haciéndolo reír con ganas.
En unos muebles más alejados, Finn, Jack y Jaeden conversaban entre ellos entretenidamente, sin estar bastante atentos a la fiesta en sí.
-Entonces no pudo venir por la cosa esa que tenía su mamá-habla Jaeden con una mueca.
-Es una pena, Wyatt siempre ánima las fiestas-comentó Finn.
-Si, con sus...cosas raras-dice Jack negando con la cabeza.
En un momento determinado, el ruloso pelinegro volteó su cabeza, y sus marrones ojos se encontraron con la chica latina de la fiesta, riéndose y hablando con su mejor amigo.
Finn parpadeó viendo como ella reía en cámara lenta, su cabello caía en suaves hondas sobre su espalda haciéndola ver sexy. Y si seguías el curso de su cabello, te encontrabas por su trasero ajustado perfectamente por un azul jean, el cual le quedaba a la perfección.