Frágil

Capítulo 4

Alex solo hizo atravesar la puerta del Sussy's cuando ya se movía entre la multitud para saludar, esto era algo impreso en su cuerpo la amabilidad, la actitud relajada y bromista, En parte  esos eran los atributos que me hicieron ceder ante él por lo tanto no culpaba la sonrisa de admiración que se instalaba en el rostro de la chica que acompañaba a Alexander.

¡Ella era mas alta que yo! de tes clara, en su cabello las raíces eran oscuras para luego irse aclarando en un rubio, su cabello es largo llegando como hasta mas abajo de los hombros a los lados tiene unos flecos que enmarcando su rostro de facciones muy simpáticas, tenía una sonrisa tímida en su rostro como sí estar ahí lo hiciera únicamente por Alex pero el sol no se tapa con una mano. Sus ojos tenía un brillo intenso malicioso quizás burlón. Con solo verla me daba cuenta que la chica era mucho más de lo que aparentaba, se veía dulce con esa actitud reservada y tímida pero con esa mirada y esa sonrisa, me dí cuenta que creía que podía dominar el mundo o que por lo menos se las sabía todas, ella se sentía poderosa . Cuando termine mi sondeo de inspección en ella me sentí culpable, examinando su actitud solo para ver algo malo en ella, un defecto,  algo para que ante mis ojos fuera una amenaza pero parecía buena incluso su risa era cálida, esa chica me hacía recordar a Michelle en muchos sentidos eran gentiles demasiado buenas pero su mayor defecto "les encantaba ser complacientes con los demás".

Las náuseas se instalaron en mi sistema al verlos y lo bien que se veían juntos, los ojos me picaban sin embargo en ningún momento los deje cristalizarse, mi corazón latia rapido y  atormentado, los celos picaban en cada centímetro de mi piel con la cólera de una pulsada odiosa de traición Pero ante cada cosa que sentía me recriminaba a mí misma-" él no es tuyo"-pensé-"no tienes ni el mínimo control sobre él", "¿Qué traición? sí no son nada".

Toda esta situación me enfermaba física y mentalmente.

Sentía un sentimiento merodeando en lo más profundo de mi ser. Un sentimiento contradictorio estaba la ansiedad de aferrarme a él y no soltarlo, posesión, el otro era la rendición silenciosa de lo que sentía por él, Sobreponer su felicidad sobre la mía. Pero la mezcla de ambos sentimientos susurrandome desde lo profundo que me deje guiar por ellos, solo acabaría dañandome—Suspiré.—Mi estado actual era trágicamente enamorada y eso incluía el lavado de cerebro que el corazón hacía, las cursilerias que se volvían emblemas de honor pero como olvidar el estado embobado del enamoramiento ese que no te dejaba pensar claramente, en lo personal el ultimo estado era el que más hacia estragos en mí, me caracteriza mucho por tener el control de las situaciones pero con Alex me resultaba imposible. Está fue otras de las razones que flecho mi corazón, enloqueció mi cordura y cegó mis ojos.

—¿Cosita?—Volvió a decir el chico frente a mi con toda la burla y calma posible, ese apodo me sonaba conocido pero no lograba recordar de donde.

Uno. dos. tres... contaba intentando no estallar y decirle un par de palabras crueles, odiaba perder el control porque era de esas personas que cuando perdían la compostura aunque fuera unos segundos se entregaban de lleno a la libertad, también porque sabía lo cruel que podía llegar a ser en ocasiones o quiza exagero por ser blanda. Valoro mucho los sentimientos de otros, ese es un territorio que muy poco sacudo, mis amigos suelen decir que tengo el defecto del buen corazón antes de hacer algo o tratar a cualquiera suelo ponerme en sus zapatos, me digo ¿si yo fuera el? ¿ me gustaria que me trataran así? incluso justifico personas algo así como buscar un rayito de luz, por el síndrome del buen corazón mis amigos tambien me tienen más en la mira, piensan que soy más frágil o fácil de romper por confiar en cualquiera. Mi modo de ver las cosas es completamente distinto si nadie tiene esperanza en ver algo bueno en otra persona, sí tan solo no se dan la oportunidad de esperar más de los demás el mundo se volvera un lugar oscuro y lleno de escepticismo.