Despertar contigo.

446 43 4
                                    

Me desperté temprano aquél Domingo debido a que tenía que hacer algunas presentaciones y firmas debido a mi reciente drama en algunos lugares. La casa estaba en silencio, los demás miembros seguramente aprovecharían para dormir un poco más. Lo único que escuchaba era la respiración de la persona que dormía a mi lado.

Siempre me quedaba embobado viéndolo dormir. En este momento, estaba durmiendo boca arriba y su respiración era profunda. Siempre fui el encargado de levantarlo porque desde que nos conocimos, fui el único que podía hacerlo. Nadie más podía levantar a aquel dormilón.

Apoyé el codo en la cama y mi cabeza en mi mano para poder admirarlo dormir. Sus ojos incluso cerrados eran preciosos y sus pestañas eran muy bonitas y largas. Su boquita ahora hacía un pucherito adorable que me invitaba a hacerle mimos y nunca dejarlo ir.

Recordé la primera vez que dormimos en la misma habitación. Sentía que no le agradaba mucho pero tiempo después me di cuenta que era solo idea mía. Pasó el tiempo y en una noche de tormenta y con mi miedo de por medio, le pedí que nunca se fuera de mi lado. Él aceptó sin rechistar.

Me sorprendía cuando hacíamos gira con ASTRO porque cuando a él le tocaba ser compañero de cuarto de otro miembro del grupo, era bastante enojón al despertarse y tenía mal humor, pero conmigo jamás. Siempre se levantaba dándome una sonrisa. Siempre me hacía chistes. Con el tiempo nos fuimos dando cuenta que nos amábamos.

Con uno de mis dedos empecé a recorrer suavemente desde su nariz hasta sus labios y me hizo gracia el gesto que hizo al seguramente sentir el cosquilleo... Sé que me estaba tardando más de la cuenta y quizás el manager se enojaría pero, sinceramente, amaba admirarlo dormir. Se veía tan sereno y más ángel de lo que ya era.

— Deja de mirarme así — murmuró Moonbin sonriendo aún con sus ojos cerrados. Me sobresalté de tal manera que casi me caigo de la cama.

— ¿Cómo sabes que te miraba? ¡No lo hice tonto! — me maldecí internamente por no saber mentir. Bin me miraba con una sonrisa. Sus ojitos brillaban y su sonrisa era cálida y dulce.

— Siempre lo haces cuando te levantas primero... Siento tu respiración cerca de mí —dijo en un susurro y sentí que mis mejillas ardían. Su mirada estaba fija en mí y eso me ponía nervioso. Incluso después de tantos años. Ese era el poder raro de Moonbin. Tenía la habilidad de ponerme nervioso o desestabilizarme con tan solo una de sus miradas. Y yo no era así. Jamás fui cursi ni era de demostrar tanta efusividad al hablar de alguien pero este chico me ponía así.

— ¿Y no me dices nada? —

— Amo que me mires de esa forma —

Mi corazón temblaba como loco. No podía creer que después de tantos años todavía me siguiera sintiendo así con él. Pero también era por su tono de voz. Amaba su timbre de voz. Su voz era tan dulce, aunque en este momento sonara algo ronca por estar recién levantado pero sonaba aún más tierna porque hablaba en un susurro:

— Que molesto eres — le dije, mirándolo y frunciendo el ceño, fingiendo estar enojado. Él soltó una risita encantadora.

— Te amo Lee... ¿lo sabes no? —

Asentí y entrelacé mis manos con las suyas.

— Sabes que yo quizás no sea muy expresivo pero... espero que sepas que yo te amo también Moon...-

Él asintió. Él me conocía. Él sabía exactamente lo que sentía por él, con sólo una mirada nos lo decíamos siempre que podíamos.

Sin previo aviso, él estiró de nuestras manos entrelazadas para atraerme más hacía si y me besó. Me beso dulcemente. Todos sus besos eran así. Y si fuera por mí... Me quedaría todo ese domingo recibiendo sus besos. Al separarnos él simplemente sonrió y me abrazó fuertemente.

— Me harás llegar tarde Moonbin — susurré sin levantarme aún.

One Shots (MJin - BinWoo - RockSan) Where stories live. Discover now