31. Planes secretos

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—Dile que él no está registrado para ir por Silver, y que tú lo llevarás a casa. Sé bueno y dile que no se preocupe — ordenó la comadreja al erizo verde.

Copiado— sonó desde el comunicador de Fang.

—No puedo permitir que este se gane más la confianza de mi padre. No voy a ser la sombra de Scourge. No de nuevo— dijo la comadreja para sí.

El plan acordado era atrapar al albino cuando saliera de la escuela. Por lo que Scourge había escuchado en la mañana antes de que Silver saliera de la casa, Shadow iría por él, así que tenían que ser rápidos para actuar junto a la chica que su padre había nombrado y evitar que el erizo negro llegara primero que ellos. Fang encontraba nada de complicado capturar a Silver, lo veía como una presa realmente fácil como para ser atrapado por 4 personas. ¿La chica cómo iba a ayudar en esto? Era una simple chica.

La comadreja tuvo la idea de esconderse detrás de unos arbustos que adornaban la gran placa con el nombre de la escuela. Tenía que llevarse al erizo casi sin ser percibido por la gente que iba a recoger a sus hijos. En su misión por acechar al pequeño Silver pudo encontrarse con que Shadow estaba frente a la puerta de la escuela. ¡¿Qué hacia el erizo negro ahí?! "Scourge en serio es un imbécil".

Scourge, ¡explícame por qué Shadow ya está aquí!—.

—¿Qué? Justo estoy entrando a mi casa y él está aquí—.

—¡Lo estoy viendo justo frente a mí!— chilló la comadreja.

—Ves a tus enemigos en todos lados. Concéntrate en la misión, quiero deshacerme de él lo más pronto posible—. Scourge cortó la comunicación.

Él juraba que era Shadow, ¡no podía haber 2 iguales! O bueno... viéndolo bien... Sí tenía algo distinto. 3 rayas un tanto grises cruzaban su ojo derecho pasando desde la frente hasta la mejilla, como si de un zarpazo se tratase; y otras rodeaban sus muñecas. Aparte, los ojos... No eran sus rubíes característicos, sino que eran un tono rojo muy oscuro, casi llegando a violeta.

Okay, ese no era Shadow. Pero sí iba por el mismo objetivo que ellos.

Desde su escondite podía ver cómo dejaban salir al albino sin ningún problema, y cómo éste iba feliz hacia el impostor entregándole su mochila y empezando a platicarle. "¡Date cuenta que él no es quien tú piensas!"

No había mucho que Fang pudiera hacer más que seguirlos con la mirada. Eso no era para nada bueno...

Caminaron un poco más lejos y él aún podía ver cómo aquel erizo sacara una de las emblemáticas esmeraldas caos: la roja. Hubo un momento donde frenaron en seco, y en un segundo desaparecieron tras un destello. "Mi padre va a matarme"...

En casa...

Desperté unas horas después. Me hizo demasiado bien dormir un poco más, descansó hasta mi alma, podía jurar. Al parecer todos se habían ido a la escuela y no había nadie en casa.

Bajé a hacerme algo de desayunar. Me bañé y me vestí para ir por Silver. Sentía una emoción inigualable al saber que iría por mi hermanito después de clases, me sacaba una sonrisa involuntaria.

Estaba listo para salir cuando me encontré con Scourge, que estaba sentado en la sala revisando su extraño reloj. Ya iba hacia la puerta cuando su voz me detuvo.

—¡Hey, Shadi! Ammm... Llamaron de la escuela de Silver y dijeron que como no estás registrado como familiar no puedes recogerlo. Si quieres yo puedo ir por él, y le aviso lo que pasó— comentó, con una sonrisa falsa.

Welcome to my lifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora