Capitulo Dieciséis

51 9 0
                                    

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Sus labios recorrían mi cuello mientras que una de sus manos masajeaba uno de mis senos, mi mente solo se concentraba en que debía salvar a mi reino dandole un heredero, Christian descendió hasta mi sexo introdujo dos de su dedos dentro de mi haci...

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


Sus labios recorrían mi cuello mientras que una de sus manos masajeaba uno de mis senos, mi mente solo se concentraba en que debía salvar a mi reino dandole un heredero, Christian descendió hasta mi sexo introdujo dos de su dedos dentro de mi haciéndome soltar un gemido, metía y sacaba ambso dedos repitiendo varias veces ese proceso. Cerré mis manos en puño apretando la sábanas, sentía  un calor ardiendiente en mi vientre bajo, Christian no se detenía, sentía el orgasmo venir en cuanto llegó curve mi espalda hacia adelante.

Mi mente se encontrada difusa solo podía concentrarse en el calor que recorría mi cuerpo tembloroso, escuchaba el palpitar de mi corazón en mis oídos, Christian volvía subir llego a mi rostro y depositó un beso en mis labios.

— Me encantas. — susurro sobre ellos al mismo tiempo que se deshacía de su bóxer. — Te amo Camil.

Me sentía mal por decirle lo mismo, aún sentía amor por Marco y no podría decirle a Christian que lo amaba solo por que el me lo había dicho a mi. Solo pude dedicarle una sonrisa y abrazarlo mientras me aferraba a su cuerpo, el se metía entre mis piernas presionado su pene contra mi centro me estremeci ante el dolor que muy pronto me atravesaría, cerré mis ojos tenía miedo.

— Mírame. — suplico, así lo hice perdiendo me en aquellos hermosos zafiros. — Nunca dejes de mirarme.

No deje de verlo en ningún momento mientras se deslizaba dentro de mí, clave mis uñas en su espalda cuando lo sentía cada vez más dentro de mi empujaba despacio hasta que aquella barrera cedió robandome un gemido de dolor.

— ¿Estas bien?. — pregunto.

— Sí, sigue.

Christian siguió embistiendome de manera pausada, entraba y salía por completo haciendo que el dolor fuera algo pasajero y el placer se abriera paso. Pero, Christian se encargó de hacer que me sintiera amada, me perdí en sus caricias en sus besos en la manera que me miraba. Esto fue único diferente a todo lo que había imaginado durante toda mi vida, el era la razón de lo que estaba sintiendo y no me refería al placer que sentía, si no a las emociones que despertaba en mi una que no esperaba sentir tan pronto. Éramos una pareja que por el calor que desprendían sus cuerpos fueron cubiertos por una capa de sudor, entre varios te amo de parte de el y sus besos, el momento seria memorable una pareja que entre jadeos alcanzaron al mismo tiempo el orgasmo.

En aquel momento pensé en cómo habría sido mi primera vez con Marco como se habría sentido y su hubiera sido tan memorable como ésta.

Marco

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Marco.

Pensar en que mi hermano poseía a Camil me hacía sentir celos imaginarla en sus brazos siendo el la razón de sus sonrisas, el tan solo imaginar que podrían estar juntos en estos momentos me hacia sentir rabia. Me encontraba en Moscú visitando a los Romanov junto a mi esposa, Svetlana era muy bonita algunas veces llegué a pensar que era Camil por la cabellera rojiza razón por la que ella se tiñó el cabello de rubio. Nunca creí que me casaría con una joven de dieciséis años gran duquesa de Rusia.

Svetlana era muy bonita, pero aún la veía como una adolescente que le faltaba mucho por vivir era mi culpa el haber atado a Svetlana a un matrimonio que solo se basaba en sexo. Christian se encargó de poner una responsabilidad muy grande sobré mis hombros una que nunca estuvo en mis planes tener. Muy pronto sería padre de una niña y no estaba seguro de sí sería bueno en eso.

— Marco. — su dulce voz me hizo dar la vuelta, se encontraba parada en el lumbral de la puerta con una sonrisa encantadora. — ¿Te encuentras bien?.

— No. — respondí tajante. Svetlana siempre quería hacerme sentir mejor,  pero nunca lo a logrado.

— El conde Mauricio y María han conseguido apoyo. — me informó. — La duquesa me dijo que esperará a que Elizabeth quedé embarazada.

— Maldita sea. — susurre.

— Marco tu sabes que debes borrar ese amor que sientes por Camil. — la mrie confundido. — Y no me mires así sabes de que hablo Marco.

Suspiré me acerque a ella y acune su rostro entre mis manos.

— La amo demasiado no es algo que se puda borrar de la noche a la mañana. — le di un beso en la frente. — Tienes que ayudar a Camil.

— La Duquesa prometió darle dos meses, debemos viajar a Versalles para darles la noticia.

Podría verla a princesa a mi hermosa y bella princesa, ver esas orbes oscuras una vez más, besar sus labios dulces.

— ¿Cuando nos iremos?. — pregunté.

— Hoy por la tarde.

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
QUEEN #SR [Completa] Where stories live. Discover now