FRASES en las ESTRELLAS

Cree.

Había pasado por episodios tan horribles en mi vida. Pero también fueron superficiales.
El hecho de que fueron así, hicieron que me estancará y que no viera lo que debía de ver. O era tanto que de pronto podría cometer suicidio. O de pronto era tanto para mí que lo podía llegar a amar. Pero el miedo no me quería dejar ir. Y mi burbuja solo me mostraba  sobretodo arcoiris pensando que era lo mejor.

Apenas tenía 17 años.
Era muy joven. Apenas era una etapa, me decían. Estas muy chico. No sabes nada lo que es vivir. Así que no te amargues.
Si, eso me decían los mayores... Pero, ¿Ellos no fueron jóvenes y no pasaron por ello? Parece que no lo suficiente. O se volvieron muy mezquinos ante ello. Pero no quiero ser así cuando tenga 30. Porque de algún u otro modo quiero creer en los jóvenes cuando pasan alguna dificultad y apoyarlos de alguna forma. Que la vida no acaba ahí.
Que aún sigue. Pero se toma la decisión.

Un día estaba en mi cuarto y estaba viendo televisión. Pasa que el muchacho que vive a mi lado, me gustaba. Si, era gay. Pero nunca le hable sobre eso. Solo lo mantuve como amigo.  Ahí tenía 15 años.
Lo siento, no dije mi nombre. Pero llámame A.
Mis padres eran de esos señores que les gustaba tener orden en todo.
Éramos cinco hermanos. Luego mi papá se divorció de mi mamá cuando tenía 12 años. Mi hermano mayor se fue con él. Y solo quedamos cuatro y mamá.
Ella después de eso no volvió a salir con nadie. Nos termino de criar pero no nos prestaba mucha atención porque ella también se cerró en su propia burbuja.
También creo que se la pasaba viendo arcoiris.
Yo vivía en un pueblo pequeño. Soy de Colombia. Siento ser tan despistado. Pero mi mundo me hizo así.
Vivía en un pueblo pequeño. Por allá en las montañas.  Pero la casa era muy linda. Tan amañadora. Es que si le hablo de ese pueblo...
Pero es que aunque quiero, debo contar mi historia, créame.
Pasa que descubrí que me gustaban los niños cuando tenía 11. Cuando estaba pequeño siempre jugaba con niñas. Pero nunca fui femenina. Hasta siempre cuando íbamos de visita a dónde mis tías me decían que donde estaba la novia. Esas típicas preguntas que te hacen los familiares.
Y nunca les dije que era homosexual. Si. Estaba atrapado. Nunca tuve un novio. Pero si tuve una novia. Porque mi ignorancia me llevo tan lejos que pensé que estaba mal. Porqué vengo de una familia muy religiosa que hasta yo mismo pensé que estaba enfermo. Y bueno. Nunca me gustó ella la verdad. Aunque trate. Solo duramos 5 meses. Le dije que era gay y se rió en mi cara. Me menosprecio y fue a decirle a casi todo el mundo. Hasta le llegó a oídos de mi mamá. Me dejó de hablar por una semana. Luego hablo conmigo. Y me mandó para una casa de esas donde van los niños groseros.

Me escape de allá luego de tres meses. Me trataban muy mal. Hasta tuve una lesión en mi pierna que termine cojo. Nunca me llevaron al hospital. Nunca recibí una llamada o visita de mi mama. Literalmente esa mujer me abandonó allí.
Si, ¿Quien quiere un hijo gay? Que ridiculez.
Después de eso no quise volver a mi casa. Me costó porque estaba muy lejos. Mientras yo estaba en Bogotá ella estaba por allá en Cali. Tal vez...
Y no pude volver a casa.
Ahí fue mi martirio. Tenía 17 años.
Pensé que estaba enfermo. Pero llegaron personas a mi vida que me cambiaron la mía. Dure dos años viviendo en la calle. Es que ni vivir le llamaría.
Hasta que un 6 de octubre de 1994 conocí a un chico. Aunque estaba mal. Y quería salir de todo... Él me salvó.
Y en él encontré lo que nunca vi en mi mamá, en mis hermanos y en mi papá: Amor.

Si, y ahora te cuento esto después de 25 años. Pero es una pequeña historia. Mi pequeña historia.

Cree. Que muchos podemos salir de cualquier cosa aunque la demos por hechas. Que tú decides salir o no. Y yo decidí cuando lo encontré a él.

Había tenido una pesadilla. Había soñado que estaba en otro cuerpo. Conté y viví una historia. Ajena a la mía. Ajena a este mundo. A este tiempo. Pero sin duda alguna, te la cuento. Porque ya tengo miedo...

Tengo el miedo de volver a repetir. Porque no soy de ese mundo. Yo ya había muerto.
No. No había nacido. Tal vez aún soy polvo de alguna estrella que apenas está surgiendo para salir de nuevo.
Tal vez debo regresar.

Ojalá y les guste mucho este micro cuento pequeño.
Lo escribí desde mi querida Colombia. A lo paísa.
Narrado en primera persona. Haciendo alusión de la homosexualidad en dicha época.
Porque sabemos bien que en esa época se vivieron más disturbios para aceptar a la persona que tenía diferentes pensamientos y gustos de los demás.
Siempre tratandonos de enfermos.
Solo porque  somos diferentes.

Los quiere.
~V