Kaworu Nagisa al fin es independiente, vive en un departamento solo donde al fin de siente cómodo. Sin embargo su felicidad momentánea se ve quebrada por alguien que interrumpe todas sus mañanas con fuertes portazos.
Más allá de molestarse, Kaworu...
Neon Genesis Evangelion (新世紀エヴァンゲリオン Shin Seiki Evangerion) es propiedad de Hideaki Anno y Gainax
Los personajes no me pertenecen, así como tampoco está historia, es una adaptación de la historia "Tras su puerta" de Cherrii-chan. Si desean ver la historia original pasen a su perfil.
Parejas: Kaworu Nagisa x Shinji Ikari
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He podido ver como la miradda de Shinji se entristece a medida que lee la tarjeta de felicitaciones que le ha enviado su hermana por su cumpleaños.
Me muerdo el labio calmando mis ansias y opto por apartar la mirada hacia los altos arboles que nos protegen del sol con su sombra. La brisa mueve las hojas, provocando un agradable sonido de Shhh sobre nuestras cabezas, los rayos del sol se infiltran entre las ramas de los árboles y tiñe la tierra del suelo en manchas de sol y sombra que se mecen con gracia; las aves cantan armoniosamente un centenar de distintas melodías, cada una a su manera de comunicarse, revoloteando de rama en rama, armando sus nidos y dándoles de comer a sus pulluelos, y por último el agradable aroma a humedad y pasto que inundaba el lugar.
Vuelvo mi mirada hacia el castaño y lo descubro limpiándose disimuladamente un par de lágrimas mientras dobla la tarjeta en sus manos y la guarda en el bolsillo trasero de su pantalón, aclara su garganta y finalmente me mira.
—¿Más abajo hay un riachuelo, quieres que vallamos? — Digo prefiriendo no preguntar acerca de la carta, ahora que ya había logrado la aceptación de Shinji, no hacia falta entrometerse más, él decidiría por sí mismo contarme o no sus sentimientos aunque tuviera que esperar cien años para aquello, lo haría por él. Aparta la mirada al suelo; Shinji es alguien quiéin se avergüenza demasiado, nuestras miradas no se sostienen por más de tres segundos, asiente levemente con la cabeza y sonrío ampliamente para relajarlo.
Nos alejamos de mi motocicleta por el sendero indicado que guía hasta el riachuelo.
— Ya casi llegamos, puedo oír la corriente del agua — Anuncio mientras nos movemos por el inestable camino repleto de vegetación. Días antes había llovido un poco, algo que generó en el camino charcos de lodo. —Ten cuidado, no vallas a resbalar — Dije mientras no apartaba mi mirada del suelo, iba algo precavido. Shinji se mantenía en silencio, concentrado al igual que yo en pisar bien el suelo. Al cabo de unos cinco minutos bajando por el sendero, pudimos vislumbrar las cristalinas aguas del riachuelo. Me volteé para ver a Shinji y confirmar que este iba bien. Le sonreí, pero el no hizo más que mirarme asustado; frunci mi ceño y antes de que pudiera preguntar que ocurría, Shinji apuntó algo frente en mi camino.
