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Lo único que diré es, gracias señor por darme la licencia de conducir y por no tener que ser yo la que tenga que ir en la parte trasera del auto.

Cuando llegamos a la casa, los chicos se bajaron del auto demasiado rápido y empujándose entre ellos, por lo que terminaron algunos en el piso. No pude evitar reírme.

—¿Acaso ustedes aman el suelo?

Su respuesta fue gruñir. Fui a la cocina para buscar algo de comer, pero me encontré con la nada misma.

—Desgraciados no tienen comida. Viven de aire.

—De comida chatarra y delivery—me corrigió Michael.

—Y sus desayunos son...

—Sobras de comidas.

—¿Cómo es que siguen vivos?

Michael se encogió de hombros dudando.

—No sabría explicarlo.

Estaba frustrada, y muerta de hambre también. No tenía otra opción que ir a comprar algo para abastecer.

—Tendré que ir a comprar entonces, ¿Ustedes almorzaron cierto?

Michael asintió en respuesta y se sentó en el sofá entre Jack y Calum empujandolos para tener más espacio.

—Nosotros estaremos jugando aquí, y luego...

—Ensayo, lo sé.

Me miraron algo confundidos y me reí negando mientras buscaba las cosas para poder ir a comprar.

—Liz me dejó una lista con algunas cosas esenciales que debo saber de ustedes para poder empezar.

Luke emitió un ruido extraño, como una queja de sufrimiento y un gruñido, no pude evitar reírme más fuerte. Se tapó la cara con ambas manos y suspiró.

—Bien, iré a comprar pero traten de no matarse.

—Bien, iré a comprar pero traten de no matarse

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Veinte bolsas llenas de mercadería. E incluso con tantas bolsas, me parecía que iba a tener que hacer otro viaje al supermercado dentro de pocos días. Pero por lo menos había comida, de mejor calidad a lo que ellos estarían acostumbrados a consumir. Porque siendo sincera, cualquier comida era mejor a la comida chatarra que consumen 24/7.

Abrí la puerta de la casa mientras iba entrando las bolsas de a poco. Tendría que hacer varios viajes hasta la cocina para llevar todas las bolsas.

Cuando por fin estaban todas las bolsas en la cocina, me dispuse a acomodar todo en su lugar. Estaba agachada en una repisa de abajo cuando me hablaron.

—¿Necesitas ayuda?

—Mierda.

—¿Estás bien?

—Solo fue un golpe, no sabía que estabas ahí. ¿Necesitas algo Calum?

—Los chicos están discutiendo qué jugaremos luego y me aburrí. ¿Quieres que te ayude a desempacar todo esto?

Niñera de 5 Seconds Of SummerWhere stories live. Discover now