Vous Simplement ❉ Loki Y Tu

Rendido

Mi plan estaba saliendo a la perfección, no resistirme era la clave.

-bien, tengo suficientes datos de ti, imágenes y vídeos, las cámaras de seguridad del supermercado si son de ayuda-dijo Aaron mientras entraba leyendo documentos-es hora de ellevar a cabo el plan-guardo los documentos y puso su huella dactilar en un dispositivo, las rejas se abrieron, prove levantarme con total calma. Me tomo del brazo, para mi sorpresa, con suma delicadeza.

-un agarre tan suave no debe ser un gesto que nazca del corazon-comenté mientras me llevaba caminando por los pasillos, me habían cambiado la ropa, llevaba sólo una blusa de tirantes blanca y un pantalón del mismo color, y adentro el aire era helado

-creo que está conversación ya la tuvimos-respondió

-no me molestaría tenerla otra vez-agregue sin darle mucha importancia

-no te mató porque me sirves, aún cuando termines el propósito de para lo que te traje, te quedarás, aún puedo sacar provecho de ti-explicó sin siquiera mirarme

-si te atreves a ponerme una mano ensima juro que te castro y con un puto cortauñas-respondi de manera amenazadora, el sonrió como un cretino y siguió caminando

-eres tan tierna cuando te sacan de casillas, pequeña diablilla-dijo dando palmadas en mi cabeza, reaccione de inmediato, con una mano aleje su brazo y le solte un golpe en las costillas, aunque el me tomo fuertemente de ambos brazos, inmovilizandome

-no sabes pelear con hombres-dijo con una mirada psicotica

-ponme a luchar con cualquiera de tus neófitos y los destruire uno a uno en un minutos-amenaze viéndole fijamente como señal de que no me intimidaba

-cuantas agallas, supongo que por tu bien, sederas de inmediato-dijo volviendo a continuar con su camino, no me quedo más que seguirle, los pasillos eran totalmente blancos, y tenían una luz que los hacía tomar un extraño tono rosado, y el vestido tan formal, con un traje azul metálico, cualquiera diría a simple vista que es un hombre pulcro y para nada perjudicado mentalmente, pero las malditas apariencias son una maldición de Dios.
Justo ahora no sabía lo que me experaba, una tortura? Dijo que nesesitaba agallas para hacerlo, quizá matar a un bebé? Para mi no es problema, si mal lo recuerdo hize eso cuando tenia once o doce años, nada nuevo, o degollar un conejo? Quizá arrancarle la cabeza con la boca a un pequeño pollito, nada nuevo para mi, e visto hacerlo y lo e hecho una o vos veces, pequeñas pruebas de valentía que te convierten en un ser insensible, pero por dentro, explotas, no lloras porque sabes que el castigo sólo será peor.
Aaron deslizó una tarjeta por una ranura, la puerta emitió un pequeño pitido y después procedió a abrirla, por instinto lo seguí más no pase la puerta, me quedé parada en el marco.
Había un asiento, varias cuerdas y una cámara de video, había un persona alistando todo, era un mujer, la típica Kim Kardashian pirata llena de liposucciones e implantes de silicon.

-nesesito explicarte todo lo que tienes que hacer?-pregunto mientras verificaba algo en la camara, rode los ojos en un gesto de molestia, no estaba exactamente del mejor humor,  me aleje de la puerta y automáticamente se cerró, tome asiento y la mujer tomo las cuerdas, tomo uno de mis brazos y, de mala gana, lo colocó en el brazo de la silla

-si vas a hacer algo hazlo bien, nadie te tiene aquí a la fuerza-dije de mala gana

-ya callate-dijo tirándome un puñetazo que esquive, pronto mis poderes sujetaron su cuello comenzando a asfixiarla

-hoy tengo ganas de matar, así que no les conviene ponerse en ese plan-advertí a los dos, Aaron me miraba por ensima de la cámara

-déjala Paola-le ordenó, deje de asficciarla y ella continuó con su tarea, aún de mala gana-sabes que? Mejor largate, más ayuda el que no estorba-dijo, la tipa tiro la cuerda de mala gana y antes de irse tomo a Aaron del hombro con fuerza