Serás mí reina

014

— Liz, Liz, oye Alice.

— señorita Alice Danvers

— em s-si señor- el profesor hablo severo sacándome de mi trance.

— va a presentarnos algo?- levanta una ceja con gesto reprobatorio, ash porque decidí tomar esta clase.

— s-si claro- es como si todo se mi hubiera olvidado, que era lo que iba a exponer!!?. Llegó hasta frente con la mirada de todos sobre mi- Bueno la historia grecorromana, es..... era...... bueno fue una época...... ósea fue.....

— señorita- no dejaba de jugar con mis manos y sentía que hacía más calor cada vez- señorita, se nota que ni siquiera sé preparo, tome asiento.

— no profesor yo si.....- Me interrumpió o más bien me salvó la voz robótica de la directora saliendo de los altavoces.

—carraspea- buenos días queridos estudiantes y profesores, espero que suspendan todas la actividades que estén haciendo y presenten toda su atención por favor, bueno, como ya se enteraron, nuestro líder y monarca, El rey Sairus, vendrá a visitar nuestro pueblo, esto es un acontecimiento importante y por ende lo tendremos que hacer digno de un rey, preparando un pequeño discurso en su honor y para esto necesitaré que los siguientes estudiantes vengan a mi oficina, Owen O'Brian y Alice Danvers, vengan lo más pronto posible, por favor, muchas gracias y buen día.

La directora deja de hablar y yo me quedo tiesa como roca. Un dis- discurso, esto es pésimo, malo muy malo. Tendría que estar por lo menos 3 tonos más pálida de lo normal para que le mismo profesor me preguntar.

— se encuentra bien señorita Danvers.

— si, si señor, con permiso- me retire del salón a paso acelerado y unos cuantos metros antes de la oficina de la directora me detuve a procesar todo esto. Yo y Sairus, a tan solo unos metros de distancia, me reconocerá, es obvio me reconocerá.

— Alice- Alguien pone una mano en mi espalda y yo me doy vuelta bruscamente- oye oye, soy yo, estás bien? qué pasa?- era Owen, o por Dios como quisiera contarle todo, como quisiera tan solo poder decirlo, pero no puedo.

— tengo cólico, me llegará el periodo pronto- fue lo primero que se ocurrió y era algo cierto aunque no tengo cólico.

— necesitas que consiga algo o llamo a alguien.

— no está bien, ya se me pasará, en las chicas esto es muy normal sabes- le sonríe intentando tranquilizarlo pero aún estaba muy preocupada- ven vamos que la directora nos espera.

Entramos y encontramos a la directora en su escritorio dándole golpes a la mesa con sus uñas mientras mira la vacío, al oírnos entrar se sobresalta y parece que se relaja un poco.

— oh, pensaba que tendría que ir a buscarlo yo misma.

— lo sentimos mucho, solo tuve un pequeño inconveniente- respondí mirando a la directora con mi mano en la parte baja de mi abdomen y ella pareció entender porque solo asintió.

— esta bien, no importa. Como dije por el altavoz, prepararan un discurso en honor al Rey, contándole lo agradecidos que estamos con su presencia en nuestro pueblo, y qué esperan que vuelva pronto, y alguna cosa más que se les ocurra pero todo con el debido respeto y admiración que se merece un rey.

— apreté mis puños y casi sentía como mis uñas perforaban mis manos. El? respeto y admiración? , ARHG!!!— si señora, me retiro entonces- antes de que pudiera hablar salgo de su oficina y corro hacia las afueras del instituto.

Camina con la cabeza gacha y las manos el los bolsillos, inconscientemente algunas lágrimas empezaron a caer por mis mejillas de lo impotente que estaba. Un discurso, para el admirable rey Sairus, Ja, Ja Ja, que buen chiste.