Seamos Felices ¿Quieres? ||Libro I

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El mayor esperaba impaciente en aquella cafetería la llegada de su mejor amigo, estaba emocionado y a la vez sentía un escalofrío recorrer su espalda. Observó al menor entrar y buscarlo con la mirada, levantó su brazo haciendo una seña para que se acercara, este lo hizo. Un silencio se hizo presente.

—Tae, dime la verdad por favor. Cuéntamelo todo —el menor solo asintió—. Quiero saber absolutamente todo aún si me duele.

—Yoongi hyung, ¿Qué es lo que quieres saber primero?

—¿Cómo se enteró Jimin? ¿Cuándo? ¿Y por qué no me lo dijo? —suspiró, sabía que escuchar aquello le iba a doler demasiado pero él era lo suficientemente fuerte como para soportarlo.

—Jiminie se enteró cuando cada vez que comía algo le daban náuseas, fue una semana antes de su cumpleaños. Te lo iba a decir en su cumpleaños cuando ocurrió aquello prefirió no hacerlo dijo que iba a arruinar aún más tú vida si lo hacía. Yoon no te imaginas todo lo que sufrió, yo llegue hasta desearte la muerte la muerte.

—Tae... —las palabras no salian su mente trataba de asimilar lo dicho por su mejor amigo.

—Cuando le propuse lo de acompanarme a Francia primeramente se nego rotundamente no querla dejarte, cuando me llamo diciendo que cambio de parecer no entendl absolutamente nada... Yoongi no quiero que me odies por lo que te dire ahora.

—Depende de lo que me contaras el menor trago saliva.

—Yoon, dos meses después de llegar a París le propuse casamiento... Yoon Entiendes por que me negué siempre a que estuvieras con el? Lo amaba demasiado, aun lo hago pero no de la misma manera desde que volví a ver Jungkook y a Mark... Nos casamos tres semanas después de que Suni naciera... ¿Sabes? El apellido de Suni es Kim Jimin me ama pero no tanto como a ti, por eso cuando nos volvimos a ver decidí ceder el paso para que tu vuelvas a conquistarlo. Yoongi estoy haciendo esto por ti, te estoy entregando al hombre que amo... No me odies —las lágrimas del menor no tardaron en salir.

Yoongi sintió un gran dolor en su corazón una gran la decepción, traición y una gran ira contra aquel chico de cabellos azules; se levantó, tomo su saco y salió de la cafetería dejando al menor llorando.
Taehyung sintió su corazón hacerse añicos, tal vez si habla traicionado a quien siempre le dio su mano cuando lo necesitaba; si el tan solo le hubiese contado sabía que el pelinegro lo entenderla y se alejarla de aquel chico que robo su corazón.