Capítulo III: Me Dejó con Vida en el Infierno

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Mi mente empieza a jugar con las emociones de mi corazón y me enreda. Literalmente. No Puedo Dormir bien desde que Hablé con Azul. Accidentalmente Encendió Algo en Mi que no Puedo Apagar desde esa Tarde-Noche. No Obstante, Debía Hacer algo primero antes de Hacerme la Cabeza Tan Rápido, de Nuevo. En el Colegio, cuando intento hablar con Cande, algo lo impide. Hay veces que pienso que eso es una señal, que ya no hay que hablarse. No me molesto mucho en querer hablarle, (por respeto) pero ella Tampoco lo hace.

Hoy Lunes No la Busqué para hablarle. La veía sonreír y no quería sacársela con querer hablar de lo mismo. Pero también vi algo que me dice y demuestra mucho, me inquieta demasiado. Se empezó a juntar hace unos días con un chico, Llamado Tobías. Creo que él Gusta de Ella, lo cual no me sorprende eso. (Como ella es muy social y trata a todos muy bonito, temo que él se enamore de ella sin que ella quisiera algo, como me pasó.
Como nos pasó accidentalmente) Pero a Él siempre le gustaron todas (Maldito insecto).
Duele ver que no quiere siquiera hablar conmigo como para arreglar y dejar las cosas en paz. Estoy empezando a aceptar que lo nuestro es imposible. ¡Pero que almenos me deje decírselo!

Al Día Siguiente, Como todos los martes ella tenía un rato libre porque iba a natación y siempre iba temprano para hacer tiempo, por lo que además de tener tiempo, no habría nadie cerca, así podemos hablar mas tranquilos. Ese era mi plan. Pero mientras planeaba esto, primero debía de soportar 4 malditas horas en el colegio. Era hoy o nunca.
Para colmo en el recreo, fue en busca de Tobías y estar con él. ¡Y TAMBIÉN CUANDO TERMINÓ LA ÚLTIMA CLASE FUE A ESPERARLO AFUERA PARA IRSE JUNTOS! ¡¿PERO QUE CARAJ*S ESTÁ PASANDO?!

Esto ya no es divertido, es triste.

Tragué saliva y seguí con el plan, debo hacerlo.
Ahora más que nunca...

Cuando llego a su clase de natación aún no había llegado y eso me dolió un poco. Pero la esperé. Si no venía, se perdía la oportunidad de escucharme decir que había que darnos un tiempo. Porque de todas formas lo iba a hacer. Aunque no se entere de mi pensamiento y decisión. Una hora después, aparece. Y al verme su cara era de "cansancio".
Dejé que se alejara un poco, pues me estaba quedando "sin energías". Luego, le hablé desde la distancia:

Yo:- Cande! Cande! Vení...

Candelaria:- (Dice "No" moviendo su cabeza hacia los costados)

Yo:- Cande! Vení un momento solamente...

Candelaria:- (Vuelve a Realizar el Mismo gesto)

Yo:- (Desganado y Comisionado) P-por favor...
(...Me rindo)

¿Qué debía hacer? Mirar el techo y ponerme a pensar...
¿Esto se Acabó Así?
Si...
Esto se Acabó Asi.
No me voy a ir con la frente en alto de acá. Mas bien, agachada. Estaba tan depresivo que casi se me escapa una lágrima. No me dijo nada, pero eso decía mucho para mi. Era hora de re-construirme. Estaba roto, desanimado, desorientado, perdido. En mi dedo meñique, yo poseía dos anillos, que un dia Hasta planeaba darle uno de los dos para que siempre me recuerde y sepa que si la amé, pero no creo que se lo merezca. Me quedé toda la clase de natación esperando absolutamente nada. No me quería ir. No podía. Esperé a que saliera y se fuera primero. Lo hacía habitualmente cuando el año pasado estábamos conociéndonos. Pero lo que Cande no sabía, es que está era la última vez que la iba de esperar a ella.

Que decepción...

El Sentimiento Sin Nombre©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora