Nuevos Recuerdos [#1] - Link x Apaya - TLOZ Breath Of The Wild +18

24. Futuro hogar

—¡No me lo puedo creer!— exclamó Prunia al ver por fina Zelda, para luego abalanzarse sobre ella.

Zelda la tomó en brazos muy contenta y la abrazó mientras ambas reían.

—No puedo creer que puedo volver a verte.— dijo Zeda muy contenta.

—¡Yo puedo decir lo mismo, majestad!— dijo sollozando un poco, aun en brazos.

No me tomó mucho el poder llegar con Prunia y poder contarle todo lo ocurrido, en realidad tan solo me puse la ropa adecuada para correr por la noche y fui directo al laboratorio sin ninguna distracción. Ahora ya era más de noche, pero la mayoría estaban aun despiertos con las velas encendidas; Zelda estaba en el primer piso de la posada "Con viento fresco" en la sala principal, frente a la mesa; estaba junto con el resto del equipo pero ahora incluyendo a Symon.

Estaba ya un poco más fresco, pero dentro de la posada se gozaba de una buena temperatura. No me sentía muy cansado, mis ganas de poder ver a Apaya me mantenían con energía, y no podía esperar a que Zelda me diera permiso para irme.

Vi como seguían hablando sobre lo mucho que se extrañaban y después hablé:

—Disculpe, princesa, ¿necesita algo más o puedo retirarme?— dije con muchos modales.

Zelda me miró muy extrañada, parecía que le había cortado la emoción del momento y la regresé a la realidad; intentó regresar a su estado original y me habló:

—No, por ahora no, puedes retirarte. Gracias por traer a Prunia.— dijo tranquila y manteniendo una sonrisa, aunque algo forzada.

—Para servirle, princesa.— dije cortésmente.

Una vez dicho esto, crucé el pasillo y me dirigí hacia las escaleras sin mucho ánimo. Era obvio que Zelda estaba algo disgustada, pero no sabía si era conmigo o con Apaya; y en todo caso, no sabía qué debería de hacer para poder contentarla.

Mientras subía las escaleras, llegó un punto en donde podía alcanzar a ver el segundo piso; Apaya estaba ahí, pero estaba lejos de las cortinas que rodeaban la cama de Zelda, más bien, estaba junto a las mochilas de varios de nosotros. Tal parece que estaba hincada, buscando algo entre el equipaje.

Me detuve en seco cuando vi que se puso de pie, no por miedo a ella, sino por lo que sostenía. Ella se puso de pie con mi túnica de campeón azul en manos; la cual había dejado en mi equipaje al cambiarme de ropa. Me parecía curioso el hecho de que ella tomara mi ropa, tenía ganas de saber qué es lo que haría con ella.

De pronto, ella abrazó la túnica con mucho mimo, pegándosela a sí misma; y hundiendo su cabeza en una parte de ella. Me costaba verlo, pues estaba a espaldas de mí, pero daba la impresión de que estaba respirando muy cerca de la misma.

Me era extraño el saber que sentía en ese momento, una mezcla entre extrañeza pero también de un sentimiento agradable; entendía bien por qué lo hacía, no estábamos pasando mucho tiempo juntos.

Terminé de subir las escaleras y me dirigí a ella.

—Apaya...— le dije con seguridad.

—¡¡¡Link!!!— exclamó muy asustada.— Por Hylia... ¡no me des esos sustos!

—¡L-Lo siento! No pensé que no estuvieras... atenta...

Ella de pronto escondió mi túnica en su espalda con mucha rapidez, procurando que no la viera y creyendo que no la he visto aun.

—¿Pasa algo?— dije fingiendo que no me he dado cuenta.

—¡¿Qué...?! ¡N-no! Nada...— dijo para luego mantener una sonrisa algo temblorosa.