13/4/19
Recuerdo cuándo jugábamos de mano... Tu siempre buscabas golpearme y yo paraba tus golpes. Recuerdo que siempre agarraba tus puños para acercarme a ti... Y ir a por él único lugar que me importaba... Tu boca. Mientras tu buscabas golpearme jugando. Yo era incapaz de hacerlo... Siempre fuiste mi debilidad... Y para contrarrestar mi desventaja intentaba que te rindas. Cuando lo hacía tu me besabas... Y por medio segundo me mirabas a los ojos, para luego reír e intentar golpearme en mis partes aprovechando que bajé la guardia, lo cuál en parte me molestaba, pero a la vez me encantaba, ya que tenía otra excusa para besarte. Y tú al ver que seguía ganando me besabas, y volvía a bajar la guardia pensando que te rendiste. Pero no, tan terca como siempre intentabas hacerme zancadilla y nunca lograbas tirarme al suelo. Siempre terminaba igual. Tu tirada en el pasto, y yo poniéndome a tu lado, y con tu orgullo de mujer antes que nada me besabas y ahí es cuándo te ponías encima de mi. Pero no tardaba mucho en volver a ponerme sobre ti solo para besarte y escucharte decir "No tiene gracia si sólo intentas besarme" y yo me reía y te decía "Es la única razón por la que seguimos jurando así".
Esto solo pasó dos o tres veces. Y hace más de seis meses. Y a pesar de todo lo que vivimos. Y todo lo sigo recordando. Y siento que estos recuerdos son lo único que me ciegan hasta el punto... De ver un futuro contigo. Pero tu sabes que si tienes un futuro con alguien, no es conmigo.
