Bajo La Lluvia

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Ya nuevamente en la ciudad de México, todos se encontraban en la casa de los Montenegro, pero Mauro y Saúl seguían sin hablarse, no porque estuvieran molestos uno con el otro, sino por la incomodad que sentían al recordar aquellos momentos; Desde el sueño con el casi beso de Mauro a Saúl, hasta cuando el castaño vio desnudo al rizado

Y era tanta la incomodidad que sentían el uno con el otro que no podían ni verse directo a los ojos, ya que sentían que el otro se enojaría si se daba cuenta de todo, o que mejor no decirles nada apra evitar malos entendidos 

Era un día normal, y Saúl estaba junto con su hermano, Oliver, Roberta y Martín en la sala principal de la casa justo enfrente de la chimenea, claro como era temporada de calor no era necesario encenderla, solamente estaban ahí relajándose, con el castaño leyendo uno de sus libros favoritos, con Oliver y Roberta estudiando nuevamente, y con Martín tomándose su merecido descanso

Martín: -Suspira- Menos mal que al fin puedo descansar de todo, estoy muerto

Oliver: ¿Eres un fantasma?

Roberta: -Ríe- No Oliver, así se dice cuando se está muy cansado 

Oliver: Ah ya entendí

Roberta: -Ríe- Ay Oliver, tienes mucha gracia

Martín: Disculpe joven Saúl

Saúl: ¿Que ocurre Martín?

Martín: ¿Sabe de casualidad en donde se encuentra Mauro? Tal vez quiera venir a hacernos compañía un rato

Saúl: B-Bueno Martín, sinceramente yo no se donde está Mauro, además dudo mucho que él quiera venir a....

Mauro: -Llega interrumpiendo- Hola, perdón pero creí haber escuchado mi nombre

Roberta: Sí, lo mencionó el joven Saúl

Mauro: ¿E-Enserio?

Saúl: B-Bueno sí pero.... Sólo para saber si querías venir a pasar un rato aquí con nosotros

Mauro: Em.... Me encantaría chicos pero la verdad es que no me siento muy bien que digamos, así que voy a salir un rato a pasear pro la ciudad

Oliver: Voy contigo hermano....

Mauro: -Lo detiene- No Oliver, no te preocupes yo estaré bien, además creo que necesito estar solo un rato, nos vemos después -Se va-

Roberta: ¿Ocurre algo entre ustedes joven?

Saúl: ¿A-A Q-Que te refieres Roberta?

Martín: Bueno joven creo que Roberta lo que trata de decir es que para nadie es un secreto que ustedes dos últimamente se volvieron muy unidos como grandes amigos, y a absolutamente todos se nos hizo extraño que de repente se trataran como completos desconocidos de un día apra otro

Roberta: De hecho, creo que no se han dirigido la palabra ni la mirada desde el viaje a la playa, ¿Ocurrió algo malo entre ustedes dos joven?

Saúl: -Nervioso- Em... Este.... No Roberta, no pasa nada  entre Mauro y yo, y S-Si me D-Disculpan también tengo me gustaría salir a caminar un poco, así que con su compermiso yo me retiro -Se va-

Martín: Siento que aquí hay gato encerrado

Roberta: Lo mismo opino

Oliver: Pues entonces dejen salir al pobre gatito


Mientras tanto

Mauro iba caminando por las calles de la ciudad, con sus manos en los bolsillos y con la mirada baja mientras pateaba una lata vacía. No fue de mucho tiempo para que llegara a un mercado ambulante, y no pudo evitar pasar por su mente aquellos tiempos en donde él y su pequeño hermano tenían que robar para así poder sobrevivir, y si no fuera por la amabilidad de Saúl ahora no estarían seguros, sin tener que robar para comer, ropa nueva, un techo y camas cómodas donde poder dormir; Sin duda alguna, el castaño llegó como un salvador a la vida de estos dos hermanos, y sin duda, Mauro se sentía en deuda con él por tan noble gesto. Lastima que ahora sea tanta la incomodidad que siente al verlo que no lo puede ver directo a los ojos

Mal Visto (Aristemo/Sauro)Where stories live. Discover now