26

15.7K 570 20
                                    

Federico puso las sábanas en el sillón y se recostó en éste pasando sus manos por detrás de su cabeza
Cerré la puerta de su habitación y busque una remera lo suficientemente grande como para usarlo de vestidito
Es irónico lo que estoy pensando porque se perfectamente que cualquiera de sus remeras me quedaría enorme
Me cambié y me cepillé los dientes con su cepillo para luego acostarme en su cama, estaba rodeada de su perfume y no me molestaba en absoluto
Me removí un par de veces y me puse a pensar un rato

¿Era justo que yo le robara su cama y él tenga que dormir en el sillón? No. ¿Se lo merecía? Si.
Pero yo no quería estar más en esa fiesta y aunque no fue una de las mejores maneras me fui con él ¿Chuck? Ya lo voy a ver en algún momento

Me levanté y me dirigí a la cocina, no sin antes frenar para ver un Federico muy concentrado jugando a la play en completo silencio
-¿No te vas a dormir?- le pregunté
- Digamos que alguien me robó mi cama y digamos que tengo al amor de mi vida en frente y lo voy a aprovechar- me contesto sin sacar la vista de la pantalla
- Eso te venía a decir, dejame dormir acá y andate a tu cama- le dije rascando mi nuca
- Callate y vení- me dijo palmeando un lugar al lado de él y todavía sin mirarme un segundo 

Dudé por unos segundos pero después accedí y me senté
-¿A que jugás?- le pregunté 
-Al pes 2013 ¿Querés?- me dijo agitando un joystick con la mano que tenía más cerca de mi
Abrió el menú y empezó a tocar los botones para poder incluirme en un juego

Cristian ha intentado enseñarme a jugar a eso desde que aprendió a usar la play station pero nunca me interese demasiado en esto, porque terminar todos los partidos 7-0 o como mucho 8-1 todas las veces que jugábamos me sacaba un poco las ganas de aprender y me resultaba aburrido
Prendí el botón que hace que la luz roja de encendido se vea y subí las piernas al sillón para poder estar en una posición mucho más cómoda
-Ojalá te dé suerte esa remera- me dijo sonriendo cuando yo había pensado que no había notado mi cambio de ropa

Empezamos jugando él con el Santos y yo con el Napoli, a los quince minutos del partido prácticamente no hacia falta que siga jugando porque había perdido completamente, así que una vez que termino el partido lo obligue a elegirse el equipo más malo que yo consideraba de la liga pes
No le había podido meter mi un gol, NI UNO
No puedo ser tan mala en esto ¿porque los hombres pueden jugar tan bien?
Cuando estaba por terminar el primer tiempo del partido nuevo metí un gol

YO METÍ UN GOL ¡¡¡Un gol!!!
Me levanté del sillón y empece a bailar sin importar la expresión que pudiera tener su cara
-¡Si si sí! Te metí un gol, no puedo creerlo- le dije dejándome caer en donde estaba sentada hace unos segundos
-¿Te puedo felicitar?- me pregunto con una inocente sonrisa

Y todo mi interior sufrió un terremoto

-Sólo me podes dar un beso, nada más- lo advertí y me acerqué a él
-Encantado- me respondió para recostarme sobre el sillón y besarme
Me besó por un tiempo sin despegar ni abrir su boca de la mía y se separó sólo para pedir mi permiso de profundizarlo
Lo agarré de la nuca y lo volví a besar, nuestras lenguas comenzaron a moverse y la habitación se volvía cada vez más calurosa
Tenía que cortar el beso.

No quería terminar como sé que vamos a terminar
Entonces abrí un poco más mi boca y tomé su lengua con mis dientes mordiéndola moderadamente para que le duela un poco
Lo solté y me paré dejándolo con una sonrisa casi tan grande como su erección

-Sos de lo peor- me dijo riendo- o te metés a ese cuarto o te violo- me advirtió y salí corriendo para su habitación no sin antes hacerle una seña con mi dedo del medio

---------------------------------------------

Narra Federico.

Me levanté lo que yo consideraba temprano porque resulta que anoche nos dormimos tardísimo y me metí en el baño para darme una ducha rápida y vestirme con lo primero que encontré para no hacer ruido y despertar a Ema porque me iba a ganar unos cuantos golpes de su parte

Terminé rápidamente y volví al living donde me puse a mirar una película cursi que estaban pasando por la tele pero como no había nada más en el resto de los canales lo deje ahí
El chico estaba corriendo en busca de su probable amada porque se le iba a terminar el tiempo o algo así, no entendí mucho

Me paré un segundo para agarrar una gaseosa y me volví a sentar mientras tomaba de ésta

-No puedo creer que un chico esté tan interesado en una película como esas- me dijo Ema apoyada en el marco de la puerta y ya con su ropa de anoche
-No estaba interesado, no hay nada más en la tele- le expliqué mientras observaba como ella se sentaba al lado mío
-¿Cómo dormiste?- quiso saber
-Bastante bien, vos pareces hasta buena dormida- le dije riendo recordando a esta mañana cuando había entrado a bañarme
-Ja ja que chistoso- me dijo revoleando los ojos y riendo

Nos quedamos en silencio hasta que la película terminó 
-No se porque no hacen películas donde muestren que es lo que pasa luego del gran beso de los protagonistas al final- me dijo pensativa
-Si que las hacen- le respondí confiado
-¿Ah si?- me preguntó 
-Si, se llaman porno- le dije con una sonrisa
-Sos un imbécil, te estaba hablando enserio- me dijo para pegarme en el hombro y pararse a buscar algo en la cocina
-Te estaba hablando enserio yo también Ema, estuve mucho tiempo desarrollando esa respuesta- le dije fingiendo estar dolido por su comentario
-Si me imagino que si Federico- me respondió riendo- ¿me podés llevar a mi casa?- me pidió
-Si no me cocinas algo para desayunar me niego a salir de este lugar- le dije

Estaba muriendo de hambre y nadie más que ella podría ser mi salvación

-Yo técnicamente estoy enojada con vos todavía, así que me merezco que me lleves a desayunar a algún lado- me dijo
-¿Encima que dormiste en MI cama te tengo que invitar un desayuno?- le respondí con fingido enojo
-Como escuchaste- me respondió abriendo la puerta y dejándome parado

¿Es una costumbre que tiene dejarme hablado sólo?

Suspiré y agarré las llaves del auto para salir y subirme a éste, una vez que lo abrí Ema se sentó en el asiento del copiloto y puso algo de música

-¿Dónde queres que te lleve?- le pregunté 
-Mmm, Starbucks- me respondió
-No se porque pero sabía que ibas a decir eso - le dije riendo
-Es que es temprano para una hamburguesa todavía ¿no?- me preguntó con un puchero
-Como quieras, vamos- le dije para poner en marcha el auto y dirigirme a donde ella quería

Una vez que llegamos busque un lugar disponible para estacionar y así lo hice
Bajamos y no había nada de gente en la cola para pedir, un alivio

Ema pidió un frapuchino de chocolate blanco con unaporción de budín marmolado y yo un café con un muffin de chispas de chocolate
Le pedí que vaya a sentarse a algún lado mientras me daban lo que habíamos ordenado

El chico me lo dió y me senté en frente de Ema
-Sos más rara, no conozco a nadie que se pida de chocolate blanco- le dije
-¿Recién ahora te das cuenta de que soy rara?- me dijo sonriendo
-Pero tengo que admitir que sos una rara linda- le dije

¿¡Qué!? ¿Eso acaba de salir de mi boca? ¿Es joda?
Soy un idiota

-Vos también sos bastante raro - me dijo ignorando mi comentario, lo cual agradecí internamente
-¿Por?- quise saber
-¿Que clase de persona cuerda va a querer darle clases a chicos insoportables que no entienden algo que para vos es facilísimo?- me pregunto revolviendo su bebida
-La clase de personas a la que sus papas echaron de casa y se estaban por quedar pobres ¿Responde tu pregunta?- le dije sonriendo
-Definitivamente

Nos quedamos hablando de cosas sin sentido, con esta chica la hora se me pasa rapidísimo

Una vez que terminamos nos subimos al auto para llevarla a su casa
-¿Nos vemos en algún momento?- me dijo cuando estaba por bajarse
-¿Te invité a desayunar y ni siquiera me despedís con un beso? No es justo- le dije cruzándome de brazos
-Federico, sos todo un bebé - me dijo acercándose y plantando un casto beso en mi labios
-Así me gusta más- le dije alejándome de ella
Sonrió y se bajó, cuando estaba por entrar a su casa de dio la vuelta

-¡Ya te había perdonado anoche pero quería que me compres comida!- me gritó antes de desaparecer por la puerta

Esta chica es lo mejor que hay.

Mi profesor particularKde žijí příběhy. Začni objevovat