Cambio de Género

Naruko rota

Todo había pasado demasiado rápido para su gusto. Hasta hace unos minutos hablaba con la directora sobre su reciente traslado y la ausencia de su supuesta prima que era naturalmente él. Ahora a solo unos pasos estaba el chico por el que suspiraba todo el año, el anterior y el que le seguía. Sus mejores amigas y compañeros, todo era nuevo desde su perspectiva como chico y temía meter la pata.

—Namikaze Naruto será su nuevo compañero, háganlo sentirse bienvenido. Para los que no lo sepan, es el primo de Naruko, la que por cierto, ya no concurrirá más con nosotros.

—¡¿Qué?! ¡¿Por qué?!-Ino no pudo evitar levantar la voz.

—Decidió terminar sus estudios en el extranjero, es todo lo que me dijeron. Ahora, su nuevo compañero dará unas palabras. Adelante-Kakashi le dio espacio.

El pobre rubio estaba que se desmayaba de los nervios y más al ver como la mirada ónix quemaba la suya propia. No perdía detalle de él.

Respira hondo. Respira hondo.

—Como ya saben... me llamo Naruto. Te-tengo dieciséis años y vengo de muy lejos, espero llevarme bien con todos-se inclinó.

—El tonto poco y se hace encima-se burlo cierto pelirrojo lleno de celos. Sasuke no desprendía la mirada del nuevo, de todos los salones tenían que integrarlo al rubio teñido en la misma clase donde estaban ellos. No iba a dejar que nadie le arrebatara el amor del Uchiha, haría cualquier cosa por él y le demostraría a su azabache—Sasuke...-habló meloso e insinuador a su oído. Deslizó la mano hacia abajo tanteando la entrepierna del ojinegro—Hagámoslo en el recreo.

Pero Sasuke no estaba para sus jueguitos sexuales. Había algo más importante ocupando sus pensamientos, quitó la mano de su intimidad y siguió mirando al blondo saludar avergonzado. Eso solo logró enfurecer más a Gaara y darle una buena razón para despachar al nuevo bufón.

—Siéntate con Kiba-respondió el sensei.

—Sí.

Caminó por el pasillo pasando por el lado de su amado que no perdía detalle alguno de sus movimientos. Pero Naruto estaba tan nervioso que no lograba captar las indirectas y las miradas de odio de Gaara incinerándolo en su cabeza. Vio a sus amigas calladas con los ojos húmedos, el corazón se le rompió, lo que menos quería era hacerlas sufrir por su culpa. ¿Qué podía hacer para remediar el problema? luego observó a Kiba quien sonreía abiertamente en su dirección.

—Hola-en sus memorias él y Kiba no habían tenido mucha comunicación. Pero era una buena persona y amaba los animales.

—¿Qué hay viejo? Siéntate con toda confianza-le animó.

—Gracias-apoyó la mochila en el pupitre y se sentó a su lado mientras Kakashi continuaba dando la clase normal. Comenzó sacando los útiles nuevos a pesar de tener todas las anotaciones en casa, debía actuar como el nuevo a la perfección.

—No tenía idea que Naruko tenía un primo. Una lástima que se fuera, eran muy unidas con Ino y las demás.

—Ya veo. Pero a lo mejor vuelva en algún momento. Ella me dijo que no se iría para siempre. Ama Japón y extrañará mucho a su familia.

—Es posible-sonrió—Pero eso del viaje al extranjero es un poco raro.

—¿A qué te refieres?

—Aquí entre nosotros-susurró—Tu prima estaba loquita por el Uchiha y este ni le daba la hora.

—¿Quién es Uchiha?

Denle un óscar se gritaba interiormente. Su actuación hasta ahora era bastante convincente y Kiba le agradaba más. Al parecer si conocía algo de ella.