cinco

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El pelirosa realmente se sentía dolido ante el comportamiento del castaño, ¿pero que podía hacer? Lo amaba, y no podía cambiarlo.

Así que luego de que pasaran unos días decidió que iba a hacerlo con avioncitos de papel, fue hacía el salón del más alto y lanzó un avión, pero rayos, había caído al lado de un castaño con sonrisa cuadrada, volvió a hacer otro intento y esta vez cayo justo en el pupitre de Jeon.

Los avioncitos decían "sal conmigo, porfavor" pero Jeongguk tan solo lo hizo un bollo y lo tiro en un cesto de basura, en cambio el de sonrisa simpática se acerco a el y le sonrió.

—No se si la carta era realmente para mi, pero estaría encantado de salir contigo. -sonrió una vez más y Jimin no pudo decirle que no.

—Claro.. Supongo que esta bien..-bajo la mirada porque se sentía avergonzado.

—Vamos a tomar un café ¿qué dices? Saliendo de la escuela. -el más bajo asintió y se despidió para poder ir a su próxima clase, sin darse cuenta que un tatuado obsevaba la escena con recelo.

Annoying ᵏᵒᵒᵏᵐⁱⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora