031

6.9K 849 278
                                    


Maratón 1/2

|| Sentimientos

—Mina no te entiendo, habla más despacio—

—No quiero que me escuchen, no tengo que decírtelo—

—¿A que te refieres Mina?— Su actitud me parecía totalmente extraña.

—Hasta hace unos momentos las chicas estábamos teniendo una conversación— La pelirosa miraba a ambos lados esperando no ser escuchada por nadie.

—¿De que hablaban?—

—Cosas de chicas— Gracias a que Mina estaba concentrada en otra cosa, su respuesta fue automática.

—¿Algo más específico?— Tome su brazo para llamar su atención.

—Eh si, perdona. Hablábamos de chicos— 

—Bueno... ¿Qué hay con eso?—

—Bueno... Uraraka habló sobre ti— La mire confundida, claramente no entendiendo la situación.

—Mina, ve al punto estoy cansada— 

—Habló sobre que está celosa sobre tu relación con Izuku, ¡Me hicieron un montón de preguntas por si sabía algo pero tú nunca me contaste nada! ¡Tuve que huir de la habitación!— La pelirosa se agarraba de los cuernos, mostrando su frustración.

Sentí el calor subir hasta mis mejillas.

—Bueno, les hubieras dicho la verdad. Que no sabes nada— 

—¡Eso es lo que me frustra! ¡Nunca me contaste cómo te sentías con Izuku-kun!— 

—Yo... bueno, no se lo que siento Mina— Jugaba con mis manos por detrás de mi espalda para disimular los nervios.

—¿Cómo?— Su cara cambió a una confundida, esperando obtener más respuestas.

—Nunca pude aclarar nada con nadie, cuando pensaba que estaba teniendo algo con Mirio él se puso en pareja con otra chica, y con Izuku siempre fuimos grandes amigos y realmente no sé que siento por él— Mire el suelo avergonzada por mi confesión.

Mina relajó su postura y tomó mis manos entre sus palmas.

—Tampoco te tienes que atormentar por no saber sobre tus sentimientos, todo sucede en su tiempo y esto no será una excepción— Mina sonrió con dulzura, instantáneamente contagiándome. 

—Gracias Mina, por todo— Nos abrazamos y luego de compartir unas pocas palabras decidimos volver a la habitación.

Al llegar nos encontramos que todas nuestras compañeras ya estaban en su quinto sueño, me despedí de mi amiga y fui a recostarme en mi bolsa de dormir.

Pero por más que lo intentara el sueño no llegaba, por más que hacia unos minutos moría por descansar 5 minutos.

—¿Alguna está despierta?— No hubo respuestas por parte de nadie, me levante sigilosamente de la bolsa de dormir y decidí dar un paseo para despejar la mente.

Tomé mi celular y observé la hora: 3:37 a.m

Solté un suspiro y me coloqué las sandalias para salir. El clima estaba perfecto, ni muy caluroso ni muy frío, en cambio una corriente de aire también agradable.

Pasé por al lado del lugar donde preparábamos nuestras comidas y luego comíamos cuando noto que no era la única persona despierta. Me acerqué a la silueta para luego darme cuenta de quién era.

Home | Mirio Togata x ReaderWhere stories live. Discover now