Día 34

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Si

Había pasado ya todo el fin de semana y estaba todo preparado para que vinieran las visitas.

O al menos eso pensaba.

~Toc toc~

-________ sal!

Me recosté en mi silla tire el móvil a mi cama y grite:

-PORQUE?

-Tienes que ayudarnos a elegir una cosa - dijo la voz de Tsyu al otro lado de la pared.

Abrí la puerta de una ráfaga de viento y tumbada en mi silla y con un gesto de indiferencia vi que al otro la do de mi puerta estaban Momo, Tsyu, Uraraka, Mina, Hagakure y una tímida Jiro escondida detrás de Momo.

-¿Y ahora que pasa? -pregunte sin moverme.

-¿Que te vas a poner para la cena? -me pregunto Hagakure.

-Yo que se, no es una boda así que me pondré unos vaqueros y una blusa, total es solo una cena -respondí encogiéndome de brazos.

-NONONO TU TE VIENES CON NOSOTRAS A POR UN VESTIDO PARA IMPRESIONAR AL HOMBRE DE TUS SUEÑOS -Mina me cogía del hombro y me sacó arrastras de mi habitación, Uraraka cogió mi móvil de mi cama y mi cartera en la mesura y cerró la puerta con mis llaves.

-Dame eso -le dije extendiendo las manos par que me diera mis cosas- mirar chicas os lo agradezco de verdad pero no tengo a nadie a quien impresionar así que si me perdonáis... -cogí el pomo de mi puerta para entrar de nuevo pero una explosión en la cocina me retuvo.

Bajamos las escaleras lo más rápido que pudimos y un Bakugo enfadado le gritaba a un Mineta con una tela en la mano.

-PERO ERES GILIPOLLAS PARRA SECA

-Pe... Pero que pasa... Si son solo unas bragas nadie lo sabrá... -dijo Mineta con miedo pero sin soltar la prenda.

En la manos de la uva andante una de mis bragas de sport que dejé en la cola para lavar te salía entre sus manos, ahora quemada por la explosión pero aún así sabía que lo que era y que era mío.

Al verlo extendí una rama de la palma de mi mano y rodee su cuello con ella con tal impulso que lo estrelle contra la otra pared.

-PEDAZO DE MIERDA MORADA TIENES QUE TENER LOS COJONES MUY GRANDES PARA SEGUIR CREYENDO QUE MIS AMENAZAS DE MUERTE NO SON CIERTAS -le grite mientras me acercaba más a él, le queme la mano hasta que la tela desapareció y el empezó a gritas. Lo dejé caer al suelo y me di la vuelta.

-Correr chicas ahora! -todas las chicas corrían hacia a mi mientras Bakugo miraba la escena impactado todavía por lo de la parra andante.

Me cogieron a caballito y me llevaron en contra de mi voluntad a la puerta.

Bakugo extendió su mano y las paro.

-Adonde la lleváis?

-DE COMPRAAS -dijo Hagakure saltando- nos vamos a comprar todas un vestido para la cena y ella también pero no quiere así que la obligamos.

-Soltarla -dijo fijamente, todas me soltaron al instante dejándome caer al suelo con miedo.

-Gracias jaja -dije pensando que me había salvado hasta que vi como le daba 20€ a Mina.

-Comprarle algo explosivo -me miró de reojo con una sonrisa picara- lo suficiente para verla incómoda toda la cena.

-Nonononon.... NO -le grite desde el suelo.

Me tendió una mano para levantarme, y en cuanto estuve delante de él me respondió suavemente y sin quitar su sonrisa juguetona.

-Si


Prohibido enamorarse (Bakugo y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora