-Haremos eso pero prohibido enamorarse ¿vale?
-Díselo al de abajo que no se entera -dije con una sonrisa en la boca
Un simple desahogo mutuo se fue de las manos haciendo que la más simple de las normas se convirtiera en un juego de haber quien puede...
Llame a la puerta de Aizawa y después de esperar 30 segundos un Aizawa bien vestido y peinado me abrió la puerta.
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(así se vería xdd)
-¿Ya estas? ______ -me dijo sin ganas.
-Sip.
-Vale vayámonos.
Nos dirijamos al instituto andando sin decir ni una palabra hasta que el rompió el silencio.
-Oye _________ siento mucho lo de....
-Si, esta bien, muchas gracias -le corte amablemente, no me gusta hablar de ese tema pero aprecio la comprensión.
-¿Estás segura de que no pasa nada con Endeavor ni...? -le volví a cortar.
-No te preocupes de verdad mientras no vuelva a arroyar a mis seres queridos sin pedir perdón no le haré nada -puse la sonrisa más "real" que pude y deje entrar otra vez al silencio incomodo.
Si alargaba esta conversación sería peor para los dos, el se sentiría mal y yo me sentiría incómoda, mejor acabar pronto.
Llegamos al gimnasio, estaba todo decorado como lo preparamos, mesas redondas para cada familia, el escenario, hasta había una pista de baile con música para cenar por la noche.
Jiro y unos cuantos más iban a tocar música "para bailar" si es que alguien lo hacia.
Se suponía que iba a tocar la flauta pero al final no pasó porque decían que esto no era un concierto y para bailar no hace falta la flauta travesera así que al final no toco.
Parecía un baile cursi de Disney Chanel.
Vestidos, música, de no ser por los padres todas las chicas habrían buscado pareja.
Todas menos yo porque claro si esto fuera una película de Americanos, mi novio había roto conmigo el día antes del baile, y ahora tendré que esperar a que venga arrastrándose cosa que no va a hacer porque esto no es una película de Americanos.
Cada uno de mis compañeros se sentó con sus padres, sin embargo como Aizawa tenía que dar la charla yo me senté en la mesa de los profesores con Mindnight, que me sonreía dulcemente desde la otra punta de la mesa.
Odio este tipo de situaciones porque siempre me preguntan lo mismo y yo tengo que contestar lo mismo...
-Disculpa querida ¿como es que te sientas con los profesores? -la mesa de Bakugo estaba justo al lado de la mía y la madre de Bakugo acerco su silla a la mía para poder hablarme.
Que incómodo, podía sentir la mirada de Bakugo posarse en mi con asco durante toda la charla pero en ese instante se intensificó.
-No me puedo sentar con mis padres -le susurre
-¿No podía venir nadie más de tu familia?
-No
-¿Trabajo?
-No
-¿Problemas familiares?
-No -intentaba cortar esta conversación lo más rápido y amablemente posible pero no podía...
-¿Entonces que les pasa?
Suspiré, ¿se lo digo? Si, ¿porque no? Total se acabarían enterando,este tipo de cosas acaban saliendo...
