Una Razón Para Volver.

Cuando nos conocimos

                       Pov.Sasuke

La primera vez que la vi fue en el funeral de su mamá; mi padre me había obligado a ir diciendo que como los dos clanes eran grandes amigos era nuestro deber mostrar nuestro apoyo. A mí no me gustaban los funerales, pues todo era triste y la gente lloraba. Y yo era solo un niño de 5 años que no comprendía muy bien el significado de la muerte.

   Pero de ese día solo recuerdo a una niña arrodillada ante la tumba de su madre. Su pelo, azul oscuro, está corto de una forma estraña. Y sus ojos parecían dos lunas brillante por las lágrimas, que se negaba derramar. Mi mamá me dijo, que esa niña, se llamaba Hinata y que su nombre significa:Un lugar soleado.

   Después del funeral, cuando la tarde cayó de la forma más forma abrumadora y fría que nunca. Me dirigí a mi lugar. Lo llamaba así porque más nadie iba o al menos eso creía, hasta que la vi a ella, Hinata, estaba sentada con las piernas recogida contra el pecho, mirando el cielo, sin aún derramar las lágrimas que sus ojos de luna negaba soltar.

     Sin saber que hacía exactamente me acerque sigilosamente y me senté detrás de ella recordando me espalda con la suya. Sentí como se tensó.

- Eres Hyuga Hinata, verdad?

    Miro de reojo como asiste lentamente.

- Yo soy Uchiha Sasuke...- a ver que no dice nada recuesto me cabeza en ella y suelto un suspiro cansado - sabías que aguantar las lágrimas o el llanto no es bueno, eso no te haré más fuerte.

    Quizás fue lo que le dije o es que ya no aguantaba más pero solo se lloro, lloro mucha como si su vida dependiera de las lágrimas y lo gemidos que soltara. También llamo a su mamá y le pidió que regresara. Estuvo así no sé cuánto tiempo, sólo recuerdo que se quedó dormida en mi hombro.

                             • • •      

    Ver Itachi asesinar a mi clan, a mí familia, solo me lleno de odio y sed de venganza. En el entierro asistieron muchas personas que no conocía, a excepción de la niña de ojos de luna, y un Hokage que habla como si sus palabras fueran a devolverme la vida que perdi.

    Sin mediar palabra o hacerle caso a los mayores, que no paraban de decir que estaba en estado de shock, me fui a mi lugar y me senté ahi por lo que parecían las horas más largas de mi vida. Ahora como viviría sin mi madre, ella toda cariño o mi padre tan exigente y... mi hermano. Ese, ese traidor. Con solo pensar en él la rabia y el sufrimiento me inundaban. Las lágrimas hacían borrosa mi vista, pero éstas se negaban correr por mis mejillas.

    Cuando el crepúsculo recién y iba por la mitad sentí como una alguien se recostaba a mí y la sensación de deja vu  no me la quitaba nadie.

     Sabía quién era pero no entendía el por qué:

- Sabías que aguantar las lágrimas y el llanto no es bueno, eso no te hará fuerte.

     Solo sentí como una solitaria gota de agua salada cayó por mi ojo... Ella ahora me daba la calidez que Itachi me quitó.

   Y en silencio jure que me vengaría de él, que no pararía hasta matarlo.

                     Pov.Hinata

    Cuando lo conocí fue en el funeral de mi madre. Intente escapar y por casualidad encontré ese lugar.
Recuerdo que durante todo el tiempo intente mantenerme firme y no llorar sabía que mi padre no tendría piedad conmigo si soltaba una lágrima.

    Pero entonces apareció el diciéndome que me desahogara, y simplemente lo hice me sentí protegida en aquel momento. La sensación de que estábamos en una burbuja y que nadie me recomendaría por ser débil.

   Recuerdo quedarme dormida en su hombro y despertarme recostada en un árbol.
          
                            • • •

   Tiempo después papá me dijo que tenía que asistir a un gran funeral, yo no quería sabía lo que pasaba pero fui obligada. Juró que lo último que pensé y deseé fue que la persona involucrada en ese fueneral fuera él.

    Verlo ahí alrededor de tanta gente, que no iba a lograr quitar el peso que sentí, me molestó. Por lo que después de él funeral fui a buscarlo y devolverle el favor. Después de un largo rato buscando me di cuenta donde debía de estar ¿Cómo pude ser tan estúpida y no darme cuenta?

   Lo encontré donde el me había consolado. No sabía que hacer ahora que lo había encontrado, así que solo hice lo mismo que el aquel día. No lo escuché llorar pero sé que lo hizo. Lo sentía, sentía su dolor e irá, mucha irá.
                           • • •

                Pov.Narradora

     Después de aquel día ambos niños no volvieron hablarse. Una que no tenían porque hacerlo. Pero algo podían estar seguros era de que Sasuke miraba constante a la niña ojos de luna, y de que ella se daba cuenta de aquellas miradas. Con el paso de los días y las semanas las miradas eran más frecuentes, pero desapercibidas para los ojos de las demás personas. Aunque ya no bastaba con miradas, de un momento a otro aparecieron sonrisa tímidas e inocente.

    El primer aniversario de la muerte de la mamá de Hinata. Esta se fue a refugiar donde mismo lo había ello hacía un año atrás. Donde para su sorpresa un niño bastante conocido la esperaba para darle el consuelo que tanto ansiaba. Cabe aclarar de qué la niña le devolvió el acto de bondad a Sasuke... Y, bueno, así ambos niños se fueron dando apoyo el uno con el otro durante sus duros años en la Academia. Nunca mostraron ser cercano fuera de las horas que pasaban en la seguridad de aquel oculto claro.

   Hinata le contaba sus miedos e inseguridad al ser considerada la Hyuga más débil del clan. Las innumerables veces en que su padre le hacía entender de qué se avergonsaba de que ella fuera sus hija. Mientras Sasuke contaba como entrenaba cada día para poder vengar la muerte de su amado clan, le contaba como le molestaba tener a todas esas niñas en sima de él todo el día y como agradecía que ella no se comportará de esa manera.

   Al paso de los años Sasuke y Hinata se fueron convirtiendo en un refugio para el otro. Siendo los mejores amigos. Ciertamente no se hablaban el la escuela ya que querian evitar que las esa molesta y chillona niñas molestaran a Hinata y para justificar su falta de interés por Sasuke está fingió un amor platónico hacía Naruto.

   Después de terminar la academia todo cambia cada uno se fue junto a su equipo y se fueron alegando uno del otro. Entre las misiones y los entrenamientos ya no había cabida para un encuentro y así terminaron volviendo ser unos extraños conocidos.