La villana Jasmine

Parte 61

Temprano por la mañana Sonjong paso a recogerla y Anie no tenía ni la menor idea para que la necesitaba tan urgente, así que dentro del carruaje le pregunto "para que es tanta urgencia?, ha pasado algo... tu madre?!" dijo ella alarmada, a lo que él le dio una de esa sonrisas que harían caer a cualquier ángel del cielo "me alegra que pienses tanto en la salud de mi madre, pero no, no es ella en esta ocasión" y el sin mentirle le dijo "es que pronto será la coronación de Li y quería ver cómo iba a estar todo" y Anie no entendía que pintaba ella allí..., "y yo...?" pregunto Anie, y Sonjong le dijo con otra matadora sonrisa *si sigue así me derretiré antes de llegar a la entrada del palacio* "pues si voy solo no me dejaran estar, pero sin duda si vas tu todo el mundo te dejara entrar", *a mí?* Anie no sabía porque consideraba Sonjong que ella era tan importante allí, si después de todo él es el mejor amigo del príncipe...así que él tenía más influencia allí que ella no?.; pero su sorpresa fue grande cuando apenas llegaron a la puerta y el guardia le dijo "señorita Anie puede entrar, pero su acompañante no", *pero si es el mejor amigo!* le recrimino mentalmente y lo más educada que pudo le dijo "viene con migo" y así pudieron entrar los dos; dentro del palacio no era muy distinto de su casa ya que todo el mundo corría hacia todos lados y en un momento se llenó con sirvientes en la sala donde estaban y una de las sirvientas le dijo "por favor señorita Anie déjeme ayudarla" y sin más se la llevó; Anie no pudo ni siquiera decirle a Sonjong o a Anzu que se iba, la sirvienta la llevo a un pasillo que estaba custodiado por guardias y le dijo "allí es" a lo que Anie no sabía a qué se refería, pero los guardias al verla le dijeron "puede pasar señorita Anie", ella no tenía ni la menor idea a donde querían que ella fuera, solo veía unas grandes puertas con un brillante dragón, los guardias ni siquiera le dijeron a donde iba a cualquier otro tipo de pregunta ellos se mantenían en completo silencio, ellos simplemente abrieron la puerta y ella ingreso.

Para su sorpresa ese lugar era nada menos que una hermosa habitación, blanca por el mármol, con incrustaciones de piedras, artículos de jade y una gran y enorme cama con seda... era hermoso... pero de quien era esta habitación...bueno pues esa duda solo alcanzo a durar medio minuto ya que como si el universo le hubiera respondido salió del vapor de una puerta un sexi dios, con unos majestuosos ojos azules como el mar, con el cabello negro húmedo con algunas gotas que aun caían brillantes, una bata de seda dorada que cubría lo justo y necesario de su parte inferior y un torso perfectamente esculpido... con su cuerpo bien entrenado y bien marcado.... No era muy delgado ni excesivamente musculoso... era perfecto.... ella sintió la necesidad de tocar ese abdomen tan bien definido... pero si se miraba un poco más abajo se podía ver un poco de esa V bien marcada *dios mío...* Anie estaba a pasos de una hemorragia nasal, lo que sus ojos presenciaban debía de ser....un ángel, no, era un dios... era Li...Li?!, rápidamente ambos se miraron y ella quedo con la boca abierta...*podía tanta perfección ser real?*, en tanto que él no se explicaba cómo había llegado ella allí... aunque no le disgustaba la idea en absoluto... pero ahora estaba desprevenido, los minutos pasaban y ambos seguían allí, estáticos, mirándose sorprendidos entonces una de las neuronas de ella por fin salió del trance del cuerpo semi- desnudo- perfecto y ella se dijo *cierra la boca, cierra la boca* y rápidamente se ocultó al otro lado de la cama tapando su nariz con las manos.