Los domingos eran día de limpieza, y normalmente hacían un domingo cada uno en la casa; pero ese en específico Taehyung le había rogado un cambio de turno puesto que debía realizar unas cosas en la empresa donde él era CEO. Jin por obvias razones no puso resistencia y se despidió de su novio temprano por la mañana antes de ponerse a realizar su basta rutina de limpieza dominguera.
No iba a negar que resultaba un poco tedioso hacer todo eso cuando estaba sólo, pues cuando estaba Tae a su lado, por lo general ponían música a todo volumen y bailaban de a ratos. Tardaba más, pues a cada veinte minutos su pareja salía del estudio a llenarlo de besos o -si es que estaban de humor- hacían alguna actividad más...física. Cuando miraba todo eso en retrospectiva, se sentía un idiota total ¡Él vivía sólo! Había estado durante años limpiando completamente en solitario su departamento, ¿Por qué de repente le resultaba tan pesado hacerlo sin compañía? Dios, hasta quería golpearse a si mismo.
Poco más de un año atrás, si alguien le hubiera dicho que hoy estaría compartiendo departamento con un hombre porque realmente lo quería, que su relación no estaba basada 100% en sexo, que ya no estaría trabajando en el bar durante la noche sino que estaría preparándose para rendir el examen de ingreso a la universidad...Si, estaba seguro que hubiese internado a esa persona en un psiquiátrico porque eso no sonaba para nada a los ideales a futuro del Jin de casi dos años atrás.
A eso de las once y media de la mañana ya había terminado con la cocina, la sala y el baño; solo le quedaban los cuartos y el estudio de su pareja por delante. Sin embargo se detuvo unos minutos para hacerse un sandwich -porque si, cuando Tae no estaba, le daba mucha pereza cocinar algo-. Lo triste fue que, mientras se sentaba en la barra de la cocina a comer su semi almuerzo, un mensaje de su pareja llegó a su móvil, dandole anuncio de que no llegaría hasta tarde en la noche. Lo único que calmaba su puchero fue ese tierno " te amo" que venía acompañado con dicho texto.
Pensó que le costaría muchísimo adaptarse a las palabras cariñosas y a los gestos sin segundas intensiones. Los últimos años de su vida los vivía a la defensiva, como alguien que no bajaba la guardia a esas cosas y disfrutaba de su sexualidad a pleno. Pero allí estaba ahora, y no se sentía triste por dejar atrás esas costumbres sedentarias a las que se había acostumbrado.
Tal vez pasaron veinte minutos más hasta que juntó la fuerza suficiente como para continuar, pues ya era pleno medio día cuando se levantó del taburete de la cocina y emprendió viaje hacía el estudio del mayor.
El lugar era propio del mayor. Tenía esos tonos cálidos y hogareños que representaban a Tae, con replicas pequeñas de sus cuadros favoritos colgados por los distintos muros. En los estantes no había tantos libros-los que había eran de arte- sino discos de vinilo y carpetas llenas de archivos de su trabajo. Si abrías alguno de los cajones de su escritorio te encontrarías con cajas de ramen instantáneo y algunos dulces, pero sobre su escritorio nunca había más que un cuadro de una fotografía de ellos dos. Siempre que la veía no podía evitar sonreír, aunque al principio hubiese puesto resistencia a esta por la vergüenza que le causaba el imaginarse a alguien entrando allí y diciendo "Oh que linda foto, ¿Quién es?" y Taehyung tuviera que decir "Mi novio"; pero ahora estaba tan feliz y relajado que ¡Al diablo, si iba a morir que sea de diabetes por la dulzura de su novio! Y no iba a negar, ese lugar, de principio a fin, olía a Taehyung. Adoraba estar ahí, embriagarse de ese aroma dulzón que emanaba su enamorado.
Como ya era de costumbre no estaba poniendo mucho esmero en limpiarlo a profundidad pues durante la semana su novio lo hacía él mismo, motivo por el cual el sitio siempre estaba ordenado. Es más, ya estaba por terminar cuando su torpeza le ganó y resbaló con el trapo del piso y calló sobre uno de los cajones abiertos que estaba acomodando, descolocandolo de su lugar a la vez que le dejaba un fuerte dolor en la espalda baja por el golpe.
