Mi querida amiga

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—♪Feliz cumpleaños a ti♪.

Hoy era el cumpleaños de _____, una chica hyliana de 16 años, de cabello castaño y ojos azules. Vivía con sus padres en la Ciudadela de Hyrule, cerca del Castillo, era muy diestra en el uso de las armas, por lo que su familia siempre sabía que el mejor regalo para ella, era alguna lanza con un diseño diferente o incluso una espada.

La dulce joven estaba por terminar de abrir sus regalos, cuando vió el que más le emocionaba abrir, era una caja casi de su tamaño, pero bastante delgada como para ser algo demasiado grande.

Todos los años desde que tiene memoria, había recibido un regalo similar, no provenía de ninguno de los invitados, sino que venía marcado como:

Para: ______
De: Tu mejor amiga.
De los Dominios Zora.

Cada año, ese regalo era el mejor de todos, y el regalo de cada año conformaba su más preciado arsenal de armas personales, este año se preguntaba que sería, suponía que sería una lanza por la altura de la caja, y acertó en su suposición, era una lanza pintada de un color violeta precioso, muy parecida a la conocida Lanza de la escama que pertenecía a la princesa Zora, solo que con cambios de color.

La joven hyliana, sonrió con dulzura y corrió a su habitación a poner su nueva lanza junto con las demás armas de su arsenal personal, cuando la vió puesta sobre un exhibidor de su pared, sonrió.

—Dónde sea que estés, misteriosa amiga, te iré a buscar algún día.– Murmuró para sí misma.

—¡_____! ¡Vamos a cortar el pastel! ¡Ven ya! – Le gritó su madre desde la sala principal de la casa.

—¡Sí, ya voy!– Respondió y corrió hacia dónde aún estaban todos sus invitados.

~~~~~~~~~~Varios días después ~~~~~~~~~

—¡Fin del combate! ¡La ganadora es ______!– Anunció el arbitro.

—¡Sí!– Celebró la joven.– Buena pelea, Harold.

—Buena pelea, ______. Te estás volviendo la aprendiz de caballeros más fuerte, puede que pronto te nombren la primera chica en convertirse en caballero real.– Respondió Harold mientras le sonreía a su amiga.

—Sí, eso espero.– Replicó la joven.– En fin, ya debo irme a casa, hoy mis padres me dieron permiso de ir a visitar algún lugar del reino sin que ellos me acompañen.

—Genial, cuídate, aunque siendo tú, no creo que te sea difícil defenderte.– Le dijo el joven con una sonrisa.

—Cuídate también, Harold, te veré en el entrenamiento de mañana.– Le dijo la joven para luego irse en su caballo a su casa.

~~~~~~~~~Cuando llegó a casa~~~~~~~~~~

—¡Mamá! ¡Papá! ¡Ya llegué!– Se anunció la jóven al llegar a casa.

De inmediato, de una de las puertas de la casa, salió su madre a recibirla, la abrazó, revisó que no tuviera ningún golpe, cosas de madres preocupadas como esas.

—Mamá, no sé si recordarás que hoy me dieron permiso de viajar a algún lugar del reino sin ustedes.– Dijo sonriente la chica.

—Sí, lo recuerdo, ya te he preparado suficiente comida para una semana, solo falta que empaques lo que necesitarás y escojas las armas que quieres llevar para defenderte.– Le respondió su madre con una sonrisa para esconder su preocupación.

—Gracias, mamá, eres la mejor.– Replicó la chica antes de ir a su habitación seguida de su madre.

—Y bueno, hija ¿Ya tienes planeado a dónde quieres ir?– Preguntó su madre.

Love Prayer (Mipha x Lectora) BotWDonde viven las historias. Descúbrelo ahora