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Al cuarto día desde que Seungcheol se quedó en la casona, Joshua salió voluntariamente de su celda para ir a buscar a Jeonghan que estaba en un estudio trabajando con un arma y su mecanismo. Este confundido de verlo ahí dejo sus guantes de cuero de lado y se acercó al ángel que seguía sintiéndose algo incómodo fuera de la zona con la que estaba familiarizado.


- ¿Por qué subiste, Shua? - Este lucia algo pensativo, reaccionando cuando sus manos fueron tomadas.


- Ah, lo siento, verte con gafas hizo que por un momento se me olvidara porque vine. Te quedan muy bien – Explico aun sorprendido, pero se focalizo ignorando el hecho de que el humano sintió su corazón acelerarse ante el repentino cumplido – Por la bendición que le di en su momento al hada, puedo sentirlo con mayor facilidad y sé que está en el bosque, no seguro de si acercarse porque viene con otro ser que irradia muy buenas vibras – Conto, pues mientras meditaba tras comer un nutritivo desayuno, en donde cada vez lograba mayor rango de percepción, lograba percibir hasta tan lejos con facilidad.


- ¿Jihoon? – Le costó relacionar las cosas pues seguía impactado porque el ángel le dijera que se veía bien con gafas – D-Debe venir por el trato, así que le iré a avisar a Seungcheol – Joshua al acabar por lo que subió, decidió solo volver a su celda para cubrirse con las mantas que le había traído Jeonghan en un inicio y usar de almohada el abrigo que al final se quedó para él pero era del humano.


Jihoon se encontraba junto a su madre, la reina de las hadas de un aura más poderosa y un aspecto elegante e irreal, quienes para no arriesgarse se mantenían a una distancia prudente de donde el príncipe sabia que empezaban las trampas entorno a la mansión de los Yoon. No esperaron mucho cuando aparecieron los hermanos Yoon, que no entendía como supieron que habían llegado ahí, pues aun no ponían alguna señal. Pensaron que iban a desactivar las trampas para que pasaran a la casona, pero en cambio Seungcheol queriendo dar un voto de confianza y respeto, propuso hacer la reunión en el bosque en donde las hadas lo vieran correcto, tan solo debían esperar a que llegara su mano derecha del trabajo para que se uniera a la reunión.


Soonyoung era esta persona quien había rondado bastante por los alrededores preparado para esta reunión, así que en cuanto llego al poco tiempo de espera se adentraron al bosque sin problemas para conversar bien y si bien Jeonghan quería ir, ya había hecho lo que podía y solo quedaba esperar, pero estaba muy ansioso.


Su mamá como en esas últimas semanas estaba en un proyecto importante con Minki, cuando supo que Seungcheol se iba a quedar decidió quedarse un tiempo en donde vivía su otro hermano, dejándolo solo un tiempo y lo notaba más ahora. Se sentía solo.


Joshua había vuelto a su lugar y tras relajarse cubriéndose con esas telas y abrigo, se sentó bajo la luz que entraba por la ventana queriendo recuperarse rápido, porque si bien sus alas ya se regeneraron, ese método de conectarse con la naturaleza también servía para calmar la parte de su mente que insistía en atormentarle recordándole todo el dolor y odio vivido. Comer los alimentos correctos, conectarse con a vida de su alrededor, escuchar los pájaros cantar fuera, la vida... de repente percibió una sensación de angustia.


No le importaría ese detalle si no fuera porque viene de cierta persona que si le preocupa, así que tras no pensarlo tanto, se levantó para ir a la salida del sótano que lo llevaría a esa persona. Se detuvo de golpe en la base de la escalera cuando la puerta que había tras subir esta, se abrió. Jeonghan se quedó congelado al descubrir que bajando la escalera estaba el ángel, quien lucía igual de confundido que él, pues les sorprendió encontrarse de esa manera y que la verdad no sabían la razón por la que querían buscar al otro, que hacer.

Remedium meum (JIHAN)Where stories live. Discover now