I will be with you [ Reddie ]

Cap 24

Holiiii hermosos osos.
¡Por fin he encontrado un pequeño hueco para escribir! (Tenía tantas ganas)
Este cap es un tanto especial, no sé si os habéis dado cuenta pero en toda la historia Eddie ha narrado en pocas ocasiones, ya que esta historia está más centrada en cómo lo vive todo Richie.
Pero este cap es especial ya que Eddie va a narrar como vivio él algunas de sus experiencias con Richie.
Espero que os guste ❤
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*Narra Beverly*
La cara de Ben cambió de repente, borrando su sonrisa y sembrando miedo en su rostro.

-¿Va todo bien?

Él no respondió, estaba inquieto.

-A todos nos pone nervioso esta "excursión ", pero según Mike ya queda muy poco, no te pongas así. -dije intentado calmarlo.

Apoyé mis brazos en sus hombros dispuesta a besar al hombre que amaba, pero él se apartó bruscamente.

-Ahora no... - y se acercó a los demás para continuar la marcha.

¿Qué le pasaba a este ahora?

Se supone que estamos aquí para poder reunir al club por completo, no para separarnos...
¿ Habré dicho algo que le haya ofendido?
Este bosque nos estaba volviendo locos...

*Narra Richie*

12;00 marcaba mi reloj.
Solo un día y medio para llegar al cuchillo, volver a Derry, robar el cuerpo de Eddie y hacer el ritual, no sin antes descubrir que se supone que es lo de "lo nunca dicho".

Tal vez Mike tuviese razón, esto era un suicidio.

¿Pero Eddie no haría lo mismo por cualquiera de nosotros? ¿Qué haría él si estuviese aquí?

Mientras caminábamos, cada vez había más preguntas que recorrían mi mente.
¿Y él cómo vivió lo que ocurrió aquel verano? Ojalá pudiese entrar en su mente y ver lo que pensaba, lo que sentía.

Pero supongo que eso es imposible ¿no?

1989
*Narra Eddie*

¡Por fin me iban a quitar la escayola del brazo!
Tenía unas ganas de poderme rascar a gusto y coger  cosas sin la ayuda de los demás ¡por fin libre!

Mi madre me había acompañado al hospital, un poco de mala gana ya que le coincidía con su hora de la telenovela.

Tengo el presentimiento de que sospecha que ya no tomo las pastillas que según ella "me ayudan a estar más sano".
Confirmando mi teoría, después de la consulta con el médico que me había quitado la escayola mi madre le pidió que si podían hablar un rato a solas.

Aquel señor era un profesional, le explicaría a mi madre que aquellos medicamentos no servían para nada.

Aunque, no estaba seguro de que aquello la convenciese.

Me habían dicho que esperase fuera de la sala, así que decidí dar una vuelta. Esperar es aburridísimo y así por lo menos podría buscar un desinfectante de esos que hay colgado en las paredes ¡los hospitales están llenos de gente enferma!

En ese momento, en uno de los pasillos oí la voz de... ¿Richie?

-... estuve bastante tiempo en el agua el otro día, así que supongo que será un mero constipado. ¿No?

Venía de una de las consultas ¿qué haría allí? Posé la oreja sobre la puerta.

-Pues según sus síntomas, parece lakaemia. La verdad es que es bastante fastidiosa ya que estas todo el día con vómito y diarrea. Y esperemos que todo se cure en unas cuantas semanas porque si llega a la fase dos corre mucho riesgo de...

-¿¡De qué? !

-Oye, ¿no deberían estar tus padres contigo?

- ¡Soy lo suficientemente mayor para venir al médico solo! No soy un bebé.

- Pero serás impertinente... Mi recomendación es que se vaya a casa y con un poco de suerte se le pasará en unos días.

De pronto se abrió la puerta y pude ver a mi amigo, pálido, con ojeras y debilidad para caminar, salir de la sala con cara de pocos amigos.

-Hola -dije con algo de temor mientras alzaba la mano -¿Va todo bien? He escuchado que estas enfermo. Por eso no has salido de casa en unos días ¿no?

Él cambió su cara y me dedicó una amplia sonrisa, como cada vez que me veía.

-Me han dicho que no es nada grave, en unos días se me pasará. Me voy a casa, estoy agotado. Ya nos veremos.

Y se marchó.

Yo seguía con aquella palabra en la cabeza; lakaemia
¿De qué me sonaba?
Nada más llegar a casa junto a mi madre, que parecía enfadada ( probablemente por la respuesta del doctor)  corrí a mi habitación y abrí mi libro de "Enfermedades que podrían matarte de un momento a otro"(regalo de mi madre) y me puse a buscar.

La lakaemia es un virus originario de África que se extendió a Estados Unidos en el 45.
Mayormente afecta al estómago e intestino causando fuertes dolores, vómitos y diarreas. Te " chupa" la energía , pero más de la mitad de los casos han remitido con éxito.

Aunque el otro porcentaje corresponde a los pacientes que han llegado a la fase dos. El virus se extiende a otros órganos vitales como los pulmones, hígado... corazón , causando un total de cien por cien de muertes en caso de pasar a esta fase.
No había ningún modo de saber si has entrado en esta fase salvo por la aparición de una serie de manchas marrones en la piel.

Este virus se encuentra mayoritariamente en aguas de alcantarilla (Hace unos días le dije a Richie que no entrase en aquel pantano lleno de basura para recoger su estúpida pelota, ¡pero no me hizo caso, como siempre! )

Se contagia con el contacto con la piel de una persona infectada, menos mal que no lo había tocado  nuestra conversación en el hospital.

La imagen de aquel Richie cansado y enfermo volvió a mi mente.

Entonces recordé haberla visto.

¡Mierda! Me llevé las manos a la boca.
¡NO PUEDE SER, NO, ESTO NO PUEDE  ESTAE PASANDO!
Había recordado que en su brazo derecho se encontraba una mancha de tono marrón.

Debía de haber un error, un malentendido. Richie no podía estar en fase dos ¿no?

Por más que intentaba buscar una explicación todo apuntaba a que Richie tenía una enfermedad altamente letal.

No, no,  no.. .

¡Debía de haber una cura! Algo que se pueda hacer.
No puedo perder a Richie.
No quiero que se muera.

Me entró el pánico, cogí todos los libros de mi estantería y me lancé sobre ellos para encontrar algo que pudiese ayudar.
Después de varias horas encontré un libro que había comprado de segunda mano en un mercadillo hace unos años, no pensé que algún día me serviría de verdad.

Encontré que en pueblos como Kanvas ( que se encuentra a unos cuantos kilómetros de Derry) han encontrado una cura experimental a la lakaemia.
El según los pacientes a los que habían administrado la a vacuna se habían curado cerca del 80℅ y no parecían haber descubierto ningún efecto secundario.

Pero el problema era que no está muy extendida, debido a la escasez de los materiales necesarios para fabricarla.

Sin pensármelo dos veces, preparé mi mochila y me escapé por la ventana. Cogí mi bici y salí lo más rápido que pude de allí, sin que mi madre, quien creo que pretende hablar conmigo seriamente de lo de las pastillas, se enterase.

Tenía que hacer algo.
No quiero perder a Richie.
Mi Richie...